Reparaciones que podemos hacer en casa sin contratar a un profesional

Reparar las juntas del suelo o de los azulejos. Esto se denomina “emboquillar”. Con el paso del tiempo y el uso, las juntas se deterioran y oscurecen. Basta con comprar un emboquillador en la ferretería y cubrir la lechada antigua para que desaparezcan los huecos y la decoloración

Reparaciones que podemos hacer en casa sin contratar a un profesional

¿Hace falta llamar a un profesional siempre que queremos subsanar algún problema? Sin duda, una pregunta que se hacen muchos usuarios. ¿El motivo? La subida en el precio de los materiales ha hecho que los costes de reparación también se hayan incrementado notablemente. Aquí vamos a dar algunos ejemplos de reparaciones que podemos hacer nosotros mismos con solo contar con las herramientas y materiales adecuados.

Soluciones para renovar el hogar fácilmente

Hay muchas reparaciones y tareas de mantenimiento que podemos llevar a cabo, aunque no tengamos ninguna experiencia en el área de la albañilería, la pintura o la fontanería. Vamos a verlas:

  • Reparar las juntas del suelo o de los azulejos. Esto se denomina “emboquillar”. Con el paso del tiempo y el uso, las juntas se deterioran y oscurecen. Basta con comprar un emboquillador en la ferretería y cubrir la lechada antigua para que desaparezcan los huecos y la decoloración.

  • Pintar las sillas. “Reducir, reutilizar y reciclar”, la conocida regla de las 3 R nos dice que podemos renovar la estética de nuestras sillas fácilmente. Solo hace falta decapante para quitar el barniz antiguo, imprimación y pintura específica para madera. Quedarán como nuevas.

  • Engrasar las puertas. Todos tenemos alguna puerta que rechina al abrirse o cerrarse. Pero, para solucionar este molesto problema, no hay que llamar a un carpintero. Es suficiente con comprar aceite para bisagras y verterlo sobre las que la sujeten al marco.

  • Sellar las instalaciones de agua. Es habitual que, con el paso del tiempo, acaben teniendo fugas. Pero, con cinta de teflón y un buen sellador, podrás evitar que esto suceda en tus llaves de paso y grifos. Es algo que debes hacer, aproximadamente, cada 5 años.

  • Nivelar percheros. La solución es tan simple como coger un taladro, realizar nuevos orificios y volver a colocarlo tapando los antiguos. Eso sí, debemos usar un nivel para evitar que suceda el mismo problema.

Otras reparaciones que podemos llevar a cabo nosotros mismos

Solo hace falta ser un poco manitas. Por ejemplo, si se nos ha roto un jarrón o maceta, podremos subsanarlo con un buen adhesivo. Lo mismo sucede si a uno de a nuestros hijos (o a nosotros mismos) se le han roto sus gafas. Ninguno de estos problemas tiene por qué suponer un gran gasto adicional para nuestro bolsillo.

Otro consejo importante es realizar una limpieza profunda del hogar, al menos, cada 6 meses. ¿El motivo? Con ella conseguiremos detectar posibles problemas de mantenimiento y averías que no hemos percibido en el día a día. Hablamos, por ejemplo, de fugas de agua, filtraciones de aire a través de las juntas de las ventanas o problemas de impermeabilización.

En definitiva, no hace falta acudir a una tienda de decoración cada vez que hay que arreglar algo. Con un poco de pericia y algunas herramientas podemos llevar a cabo múltiples tareas de mantenimiento, mejora o renovación de nuestro hogar. Se trata de inversiones pequeñas que, a la larga, salen muy rentables, ya que nos ahorran visitas de profesionales y reformas que, de otro modo, serían innecesarias. Así que no hay excusas para no ponernos manos a la obra.