Localizan a una nonagenaria francesa y su hijo de 60 años, desorientados en Berriozar

Foto. centro de coordinación de Policía Foral
Foto. centro de coordinación de Policía Foral
La cooperación policial posibilita la atención a una pareja de franceses en Berriozar
Localizan a una nonagenaria francesa y su hijo de 60 años, desorientados en Berriozar

 Agentes de la Brigada de Comunicación y Enlace Operativo y de la Unidad  de Cooperación Policial de la Policía Foral, en coordinación con la Policía Municipal de  Berriozar y agentes franceses, han colaborado en la localización de un familiar de dos  personas de nacionalidad gala que se encontraban desorientadas en Berriozar. 

Todo se inició con una llamada particular a SOS Navarra. La alertante informó que se  encontraba con una mujer de 90 años de edad, completamente desorientada, que sólo se  expresaba en francés, y que portaba su documentación personal y las llaves de un  vehículo, que tampoco sabía dónde se encontraba. En un principio SOS movilizó a una  patrulla de la Policía Municipal de Berriozar que acudió al lugar. Los agentes municipales  solicitaron a continuación colaboración a la Policía Foral. 

Desde el Centro de Mando y Coordinación (CMC) de la Policía Foral, todas las actuaciones  dirigidas por el Jefe de Sala estuvieron centradas en asegurar la situación de los  ciudadanos franceses y a localizar a algún familiar o persona que pudiera hacerse cargo  de ellos. Se gestionó con la Policía Municipal la localización del vehículo, en cuyo interior  se encontraba un varón de 60 años con déficit cognitivo e hijo de la mujer desorientada.  También se solicitaron a SOS Navarra recursos médicos para trasladar a las dos personas  al Hospital Universitario de Navarra, para una valoración. 

 

Con la identificación de la mujer, un agente de la Unidad de Cooperación Policial de la  Policía Foral, a través del agregado de Interior de la embajada francesa en Madrid y del Centro de Cooperación Policial y Aduanera (CCPA) de Hendaya, realizó las averiguaciones  y gestiones tendentes al conocimiento de la posible existencia de denuncias por  desaparición de las personas localizadas en Berriozar y a la localización de familiares u  otras entidades que pudieran hacerse cargo de las mismas.

Fruto de estas gestiones, se recibió la llamada de un hijo y hermano de las personas  afectadas. Indicó que podría desplazarse a Pamplona al día siguiente, desde su domicilio  en proximidades de Toulouse. Desde el Centro de Mando y Coordinación de la Policía  Foral se mantuvieron contactos con el Hospital Universitario de Navarra, donde madre e  hijo quedaron ingresados. 

Al día siguiente, una patrulla de seguridad ciudadana acompañó al familiar hasta el hospital  y posteriormente hasta el lugar donde se encontraba el vehículo para que hacerse cargo  del mismo.