La Red de lucha contra la pobreza de Navarra pide a los partidos políticos que no se olviden de las más de 95.000 personas en situación de pobreza en la Comunidad Foral

Tras conocer los datos de la Encuesta de Calidad de Vida, la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social ha presentado hoy una valoración del riesgo de pobreza y exclusión social en Navarra, en la que destacan que, a pesar de ser la Comunidad que ofrece menor índice AROPE, es la que menos mejora. 

Desde la Red señalan estar muy preocupados/as ante el número de personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad en la Comunidad Foral. Por segundo año consecutivo, la tasa AROPE indica que el 14,5% de la población está en riesgo de pobreza y/o exclusión social, lo que supone más de 95.000 personas. 

Por ello, solicitan un compromiso de todos los partidos políticos en el desarrollo de políticas públicas orientadas a resolver las diferentes situaciones que se viven en la Comunidad Foral de Navarra. Situaciones realmente desgarradoras en las que las personas no tienen oportunidad para desarrollar una vida digna. Situaciones que significan no poder afrontar gastos de necesidades básicas: el 3,5% de la población en Navarra no puede comer carne o pescado cada 2 días, casi 1 de cada 10 personas no puede afrontar gastos de vivienda ni puede mantener una temperatura adecuada en casa y 2 de cada 10 personas no pueden hacer frente a gastos imprevistos. 

A pesar de ser la Comunidad que ofrece menor índice AROPE en el conjunto del Estado, es la que menos mejora. Y resulta alarmante que, si comparamos los datos de tasa de riesgo de pobreza actuales con el año 2008 (año de referencia previo a la crisis económica), la Comunidad Foral de Navarra sea la autonomía en la que más ha aumentado la desigualdad, un 85 %. Esto supone que 12 de cada 100 personas tienen ingresos bajos en relación al conjunto de la población navarra. 

El análisis del indicador AROPE, además, no muestra cómo afecta la inflación en los hogares, cuando la realidad es que el incremento sostenido del Índice de Precios al Consumo (IPC) impacta enormemente en unas economías ya de por sí debilitadas. Especialmente cuando los mayores incrementos del IPC se están dando en vivienda, transporte, vestido y calzado, y alimentación. Todas ellas, necesidades básicas.

Por tanto, en la Red exigen que estos retos se afronten con urgencia en la siguiente legislatura. Señalan que es necesario un impulso desde las instituciones públicas para desarrollar un Estado de Bienestar que dé respuesta a las necesidades de las personas en situación de pobreza y/o exclusión social frente a las causas que la provocan, tanto a nivel estructural como coyuntural. 

*El indicador AROPE (At Risk Of Poverty and/or Exclusion, en sus siglas en inglés) es la medida estadística estandarizada y armonizada que permite medir la pobreza e incluir la multidimensionalidad de la exclusión social para todos los países de la Unión Europea. AROPE mide la población en riesgo de pobreza o exclusión social como aquella población que está al menos en alguna de estas tres situaciones: riesgo de pobreza, carencia material y social severa y/o baja intensidad en el empleo.

 

 

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