Elena Bandrés: "Estamos ante una generación “pornoactiva” en la que el consumo se generaliza en torno a los 14 años"

Foto: Una imagen de la jornada en Civican
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Además, para el 30 por ciento de los adolescentes la pornografía es la única fuente de información sobre sexualidad. Cerca de un centenar de personas asiste a una jornada sobre pornografía y adolescencia organizada por la Delegación del Gobierno en Navarra
Elena Bandrés: "Estamos ante una generación “pornoactiva” en la que el consumo se generaliza en torno a los 14 años"

La Unidad contra la Violencia sobre la Mujer de la Delegación del Gobierno en Navarra ha celebrado recientemente en Civican la jornada “Adolescentes y pornografía: acceso temprano y consecuencias” a la que ha asistido casi un centenar de personas, entre ellas, policías que imparten formación en colegios en el marco del Plan Director para la Convivencia y Mejora de la Seguridad de los Centros Escolares y sus Entornos.

La primera de las ponencias ha corrido a cargo de Elena Bandrés, que es periodista y profesora de Comunicación de la Universidad de Zaragoza e integrante de la asociación “Periodistas por la igualdad”. Ha hablado sobre “Pornografía y juventud: cómo hablar de las consecuencias”. Ha asegurado que el porno es una epidemia y que estamos ante una generación “pornoactiva” en la que el consumo se generaliza en torno a los 14 años.

Ha señalado Bandrés que cada día en España se producen millones de visitas a páginas pornográficas, la mayoría de ellas, a través del teléfono móvil. “Los jóvenes creen que el porno es real y el porno lo que hace es fijar los parámetros de desigualdad”, ha apuntado. Además, para el 30 por ciento de los adolescentes la pornografía es la única fuente de información sobre sexualidad.

Ha asegurado que cada día se reciben hasta 3.000 exposiciones a imágenes sexualizadas, pornográficas o sometidas a los estereotipos de género, desde la publicidad, hasta los videojuegos, la música, el cine o las series de televisión. Todos esos elementos reflejan “un desprecio social hacia las mujeres, aunque sea de manera inconsciente”, ha apuntado Bandrés, y la pornografía “erotiza ese desprecio”. La prevención mediante la educación, los controles legales y la promoción de relaciones igualitarias son claves para combatir la pornografía, ha señalado.

Por su parte, la psicóloga sanitaria y sexóloga clínica Alexandra Crettaz ha hablado sobre “Educación sexual, afectiva y relacional contra la ciberviolencia de género y la pornoviolencia”. Ha incidido en el incremento de los casos de violencia de género digital en todas sus manifestaciones, como el sexting (compartir imágenes de contenido erótico o pornográfico) o la sextorsión (extorsión para evitar que se compartan imágenes privadas). “El amor no es control”, ha señalado, “pero existen muchas formas de control a través del teléfono móvil”.

Crettaz ha apuntado que la nueva pornografía, la pornoviolencia, enseña la violencia sexual hacia las mujeres y estimula la cultura de la violación. “Se habla del placer del hombre y del sufrimiento de la mujer y, de esta forma, se construye el deseo viendo violencia”, ha asegurado.

En cuanto a las secuelas, ha hablado de las conductas de riesgo para la salud física y emocional que puede generar el consumo de pornografía, de las repercusiones psicológicas, de las disfunciones sexuales y de una desconexión empática. 

Para fomentar una relaciones sanas e igualitarias, Crettaz ha apostado por una educación sexual integral.