Denunciado un ciudadano italiano tras esconder un cachorro de perro bajo la alfombrilla de una furgoneta para introducirlo desde Túnez

Foto: el pequeño perro
Foto: el pequeño perro

La denuncia y el seguimiento de la infracción se realizó a través de las redes sociales 

Denunciado un ciudadano italiano tras esconder un cachorro de perro bajo la alfombrilla de una furgoneta para introducirlo desde Túnez

Un ciudadano italiano ha sido denunciado por introducir en territorio de la Unión Europea de forma ilegal un cachorro de perro escondido en una furgoneta. 

La investigación se inició partiendo de una denuncia ciudadana realizada en las redes sociales de la Policía Foral. Agentes del Grupo Investigación Medioambiental tuvieron conocimiento de que una  persona de nacionalidad española, junto con otras, introdujo en territorio de la Unión Europea un cachorro de perro procedente de Túnez. Para hacerlo sin que fuera detectado por agentes policiales  o aduaneros, utilizaron un compartimento situado bajo la alfombrilla del copiloto de la furgoneta en  la que viajaban. Este hecho se realizó sin cumplir todos los requisitos exigidos por la normativa  relativa a la entrada de animales de compañía desde países terceros a la Unión Europea. 

 

El Reglamento 57/2013 del Parlamento Europeo y del Consejo relativo a los desplazamientos sin  ánimo comercial de animales de compañía establece unos requisitos zoosanitarios que son aplicables, entre otros animales, a los perros. Estos requisitos son: marcado, vacunación antirrábica,  valoración de anticuerpos de la rabia y medidas sanitarias preventivas contra otras enfermedades o  infecciones. El animal debe de ir acompañado de un documento de identificación y el  desplazamiento debe de realizarse únicamente a través de determinados puntos de entrada de  viajeros. El objetivo es evitar la introducción de animales susceptibles de ser trasmisores de  enfermedades mortales para las personas, como la rabia, desde países donde no está erradicada. 

El seguimiento realizado en redes sociales permitió determinar que el animal iba a quedarse en Italia  en manos de un ciudadano de dicho país. Los hechos fueron puestos en conocimiento de las  autoridades policiales italianas, Guardia di Finanza y fruto de esta colaboración internacional, se  impuso una sanción realizada por la Agencia de Protección de la Salud de Brianza, Provincia de  Monza y Brianza en la Región de Lombardía.