Activistas antitaurinos regresan a Pamplona: "la tauromaquia llena la ciudad de almas en pena"

Las organizaciones por la defensa de los animales AnimaNaturalis PETA organizan por 19° año consecutivo su protesta de alto impacto contra la tauromaquia en Pamplona. Un día antes del chupinazo, la protesta ha reunido en la Plaza Consistorial a casi un centenar de activistas provenientes de diversas ciudades de Navarra, España y Europa. Los participantes han representado semidesnudos a los espíritus ensangrentados de los toros que mueren cada año durante esta semana de fiestas.

La acción contra las corridas de toros se enmarca en la campaña “Sanfermin Sin Sangre” de AnimaNaturalis, que ya supera las 200 mil firmas contra la tauromaquia a través de su web www.sanferminsinsangre.org. “El sufrimiento de los toros es promovido y hasta financiado por autoridades e incluso instituciones religiosas de Navarra”, afirma Cristina Ibáñez, representante de AnimaNaturalis. “Suena inaudito decirlo en voz alta, pero es así. No se puede tener las prioridades más confundidas que eso y tener una brújula más distorsionada”, añade.

“Vivimos tiempos difíciles que merecen la total atención y trabajo de quienes toman las decisiones”, explica Ibáñez“Y cuando eligen invertir en distracción, embrutecimiento y crueldad hacia los animales, en lugar de ninguna otra medida para apoyar a los ciudadanos… es una actitud mezquina y desalmada”, agrega. 
 
Estas organizaciones apuntan que "según datos oficiales del Ministerio de Cultura, en 2018 -el último año normal antes de la pandemia- se dio una caída del 58,4% de los festejos en plaza respecto al 2007 y del 2,1% respecto al 2017 y también el número de encierros y otros festejos populares disminuyó respecto a anteriores años". 

En la actualidad, 2 comunidades autónomas ya consideran abolidas las corridas de toros: Cataluña y Canarias, y en otras tres la tauromaquia está relegada a un espectáculo minoritario y decadente: Islas Baleares, Galicia y Asturias.

A pesar de esto, se calcula que más de 9.000 toros serán matados en plaza y más de 50.000 serán explotados en festejos populares, cuyo destino será igualmente la muerte, este año o los sucesivos.  


 

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