La tasa de mortalidad por ictus ha descendido un 34% en los últimos 15 años en Navarra

Los datos recogidos en el último Boletín de Salud Pública muestran descensos significativos de mortalidad -entre el 25% y el 42%- en las personas mayores de 65 años, mientras que las tasas se mantienen estables en el grupo de menores de 65 años

La tasa de mortalidad por ictus ha descendido un 34% en los últimos 15 años en Navarra

El último Boletín de Salud Pública, correspondiente al último trimestre del año, presenta los datos de tendencia de la mortalidad por ictus en Navarra. En el quinquenio 2018-2022 fallecieron una media de 347 personas por ictus al año en Navarra (194 mujeres y 153 hombres), representando el 5,9% del total de fallecimientos registrados en 2022. En los últimos 15 años los fallecimientos descendieron, desde 443 en 2008 a 362 en 2022 y las tasas ajustadas un 34%. Por grupos de edad, se registraron descensos significativos entre el 25% y 42% en los mayores de 65 años, mientras que las tasas se mantienen estables en el grupo de menores de 65 años al comparar el último quinquenio con los dos anteriores.

La tasa ajustada de mortalidad de Navarra, 45 por 100.000, es algo más baja que la estimada para España en el mismo periodo, 48 por 100.000, y algo más alta que la registrada en Luxemburgo, Suiza y Francia, que fueron los países con menores tasas de Europa en 2019 (entre 40 y 42 por 100.000). Descensos similares a los observados en el número de fallecimientos y en la tasa de mortalidad por ictus observado en Navarra han sido descritos en la Unión Europea, donde el porcentaje de descenso medio anual de las tasas ajustadas de mortalidad en el periodo 1996-2015 fue de 4,2%, muy similar al 4,1% observado en la Comunidad Foral.

Los descensos de la mortalidad se han relacionado en buena medida con mejoras en la supervivencia tras el ictus y, en menor medida, con descensos de la incidencia, según algunos estudios. Entre los avances que han podido contribuir al descenso de la letalidad tras un ictus se encuentran la trombolisis, el desarrollo de las unidades de ictus y, más recientemente, tratamientos como la trombectomía. El descenso del tabaquismo y las mejoras en el diagnóstico y manejo de la hipertensión son igualmente otros factores contribuyentes. Algunos estudios han mostrado también descensos de la incidencia de ictus por las mejoras en la prevención primaria y el manejo de los factores de riesgo.

El ictus es, además, una causa de ingreso hospitalario importante en Navarra. En 2021 se registraron 1.230 ingresos por ictus en los hospitales de la Comunidad Foral, de los cuales 1.114 correspondían a ingresos de 998 personas residentes en Navarra (543 hombres y 455 mujeres). Los 116 ingresos restantes correspondieron a personas residentes fuera de Navarra.

Según la Organización Mundial de la Salud, esta enfermedad es la primera causa de discapacidad física en las personas adultas y una de las principales causas de mortalidad y demencia. Se estima que el número de personas viviendo tras un ictus aumentará en Europa un 27% en los próximos 30 años, debido al envejecimiento de la población y a las mejoras de la supervivencia.