Navarra cuenta con un protocolo similar al de Euskadi ante un hipotético caso de ébola
La anterior crisis del ébola en 2014 dejó un protocolo de actuación de las autoridades sanitarias en todo el país, también en Navarra que cuenta con un protocolo de actuación ante casos sospechosos de ébola, como el que se ha activado en Euskadi ante el caso de una antropóloga de Donostia que viajó a la República Centroafricana.
Todo indica que se trata de una falsa alarma, y aunque Osakidetza ha rastreado preventivamente los contactos de la mujer, la activación del protocolo por posible caso de ébola no significa que la paciente esté infectado por esta enfermedad. Lo más probable es que la fiebre se deba a otra causa, pero cumpliendo los criterios clínicos y epidemiológicos, ésta es una de las enfermedades que, entre otras, se deben descartar.
En Navarra el protocolo se activa cuando un paciente tiene fiebre superior a 38,3º, síntomas clínicos y además tenga el antecedente de haber estado en zonas geográficas de transmisión o haber estado en contacto con un enfermo, sus fluidos o muestras biológicas de enfermos.
Ante cualquier sospecha, el médico que atiende al paciente debe comunicarlo al 112. SOS Navarra lo notifica de inmediato al Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra. Se verifica de forma inmediata si se cumplen los criterios clínicos y epidemiológicos y si así fuera, se activaría, como así ha sucedido, el protocolo considerándolo caso en investigación.
La prueba fundamental que se realiza para el diagnóstico, es la detección del ADN del virus en una muestra de sangre. La extracción de sangre y esta prueba se realiza en el propio Hospital Universitario de Navarra aunque también se envía una muestra de sangre al Centro Nacional de Microbiología.
Solamente en el hipotético supuesto de que la prueba fuera positiva, personal sanitario del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, se encargaría del estudio de los familiares y contactos del paciente así como de las pautas a seguir.
