Alberto Catalán (UPN) “las víctimas de ETA también son memoria democrática de España”

Foto: Alberto Catalán, en el Senado
Foto: Alberto Catalán, en el Senado

El senador regionalista considera sectaria y limitada la Ley de memoria democrática, que “olvida a las víctimas de ETA y es fruto de un acuerdo con Bildu”

Alberto Catalán (UPN) “las víctimas de ETA también son memoria democrática de España”

El senador de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Alberto Catalán Higueras, ha defendido hoy en la Cámara Alta una enmienda a la totalidad al Proyecto de Ley de Memoria Democrática. Para Catalán, el proyecto de ley es “sectario y limitado, ya que olvida a las víctimas de ETA y ellas también son memoria democrática de España”.

El olvido de las víctimas de la banda terrorista ETA, el cuestionamiento de la Transición y el acuerdo con Bildu constituyen, según Catalán “motivos más que suficientes para no apoyar una ley que es un claro ejemplo del sectarismo que viene caracterizando las políticas de este Gobierno y sus socios independentistas, que quieren romper los acuerdos y consensos alcanzados en la Transición. Compromisos que, por puro interés partidista, desprecian. Todo por mantenerse en el poder a cualquier precio”.

En su intervención Catalán ha recordado las palabras pronunciadas por Don Fernando Sebastián, arzobispo de Pamplona, en el funeral de Tomás Caballero, concejal de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona asesinado por ETA en 1988: “No se puede matar, ni se puede apoyar a los que matan, ni se puede apoyar a los que apoyan a los que matan. No cabe otra cosa que la condena clara y rotunda de este asesinato inhumano y demencial, de todos los asesinatos de ETA ejecutados a sangre fría para dominar y doblegar la voluntad de un pueblo por este procedimiento siniestro de terror y de muerte”. Por ello, Catalán se ha preguntado “¿por qué la obsesión del Gobierno por blanquear y pactar con Bildu?”.

El senador de UPN ha denunciado también, como se recoge en el “Manifiesto por la Concordia y en Defensa de la Transición”, firmado por excargos de diferentes ideologías, entre ellos expresidentes socialistas del Senado, el hecho de que la norma cuestione tanto a los primeros gobiernos democráticos “tras un acuerdo con Bildu” como la Ley de Amnistía de 1977 “con referencias que, desde el punto de vista jurídico, carecen de sentido por no tener consecuencias jurídicas y que, desde el punto de vista político, son absurdas al apoyar planteamientos que ponen en duda el principio de reconciliación que motivó la norma”.

Asimismo, ha cuestionado que el texto del proyecto no haga ninguna referencia a una característica que “define la democracia de cualquier país” como es “el respeto a la libertad religiosa, dada la persecución, tortura y asesinato de miles de españoles (sacerdotes, religiosos y seglares) por el mero hecho de ser cristianos”.

Catalán ha pedido que no se traicionen los consensos y acuerdos alcanzados durante la Transición, ni tampoco el espíritu de Ermua, “que supuso el levantamiento definitivo de la sociedad española frente a ETA”. Y ha recordado que la propia Fundación Miguel Ángel Blanco “ha acusado a la ley de romper la unidad e integrar a partidos que buscan reescribir la Transición del 78 y la considera una humillación y una infamia hacia Miguel Ángel Blanco y todos los asesinados por defender la Constitución”.

El senador regionalista ha afirmado que UPN “está con las víctimas de terrorismo y no con Otegui y Bildu. Otros hablan de Otegui como hombre de paz y siguen empeñados en blanquear a Bildu”. 

Finalmente, se ha preguntado si es justo y digno que el Gobierno negocie y acuerde una Ley de memoria democrática en España con Bildu y, en este sentido, ha recordado las palabras que en su día dirigió la madre de Joseba Pagaza, asesinado por ETA, a Pachi López: “Haréis y diréis cosas que nos helarán la sangre”.