Pájaros, trampas de feromonas y anillos de plástico contra la 'triada' de plagas en árboles y zonas verdes de Pamplona esta primavera

Foto: Ayto. de Pamplona
Foto: Ayto. de Pamplona
Ayuntamiento reactiva las medidas de control de tres lepidópteros: el minador del Castaño de Indias (Cameraria ohridella); la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) y la mariposa del boj (Cydalima perspectalis), aunque esta última ha ido remitiendo de manera natural y con la ayuda de los tratamientos de aplicados por el Servicio de Zonas verdes
Pájaros, trampas de feromonas y anillos de plástico contra la 'triada' de plagas en árboles y zonas verdes de Pamplona esta primavera

Como todas las primaveras, con la subida de temperaturas, se reactivan los ciclos vitales de algunos de los insectos que inciden en el ecosistema urbano, en general inocuas para las personas, pero que sí tienen incidencia en árboles, arbustos y, a veces, en mascotas domésticas. El Ayuntamiento reactiva las medidas de control de tres lepidópteros: el minador del Castaño de Indias (Cameraria ohridella); la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) y la mariposa del boj (Cydalima perspectalis), aunque esta última ha ido remitiendo de manera natural y con la ayuda de los tratamientos de aplicados por el Servicio de Zonas verdes.

La presencia de plagas es algo natural y forma parte de la biodiversidad, de lo que se trata es de regular su desarrollo para controlar sus efectos, aunque el cambio climático y el calentamiento están provocando que el tiempo de permanencia de las plagas se prolongue durante varias estaciones. Además, los límites geográficos no operan para los insectos.

En este proceso de control el Servicio de Zonas verdes del Consistorio desde el año 2008 evita el uso de sustancias toxicas, promoviendo procesos naturales como, por ejemplo, la ayuda de pájaros u otros de carácter etológico, como las llamadas ‘trampas de feromonas’, unas cajas-trampa transparentes con base amarrilla que estos días pueden verse suspendidas de las ramas de algunos árboles de la ciudad.

El ciclo de las plagas y la sensibilidad de los árboles ante ellas se ven modificados por los cambios en la climatología (sequedad, temperaturas, horas de calor etc.) por lo que las medidas contra el cambio climático contribuyen a su control. En ese sentido la ciudad trabaja contra el cambio climático a través de la estrategia Go Green Pamplona, un conjunto de medidas en para mitigar y adaptar la ciudad a los nuevos escenarios.

La tríada de primavera

El Servicio de Zonas Verdes desde el año 2013 se trata de atajar la proliferación de la oruga Cydalima perspectalis, un insecto que ataca a las hojas de varias especies de arbustos provocando su defoliación para, posteriormente, alimentarse de la corteza por lo que su efecto puede ser letal para la planta. Procedente de Asia, posiblemente se propagó a través de plantas ornamentales. Las larvas se activan en marzo y las mariposas se pueden ver entre junio y octubre. Es un insecto voraz ya que las hembras realizan de 1 a 4 puestas al año, bajo las hojas del arbusto. Inicialmente se hace control manual de las hojas, pero también se instalan ‘trampas de feromonas’ para capturar las mariposas macho y así evitar la fecundación de las hembras, y por tanto la aparición de nuevas generaciones de la plaga.

Este mismo sistema de trampeo se utiliza con el minador del Castaño de Indias, un microlepidóptero procedente de Macedonia que ataca al Castaño de Indias, una especie cada vez más frecuente en parques y jardines. El insecto ataca las hojas absorbiendo sus nutrientes, dejando pequeñas “galerías” de color marrón, perceptibles a simple vista. El parásito puede llegar a atacar entre el 70-100% de las hojas de un árbol. Las mariposas son muy pequeñas, de color marrón con bandas negras y blancas, y pueden hacer entre 3 y 5 puestas al año, dependiendo de las temperaturas. Generalmente los adultos son viables desde finales de marzo hasta inicios de noviembre, realizando las puestas entre abril y octubre.

El tercer insecto tratado en este entorno urbano es procesionaria del pino, de hecho el único que puede afectar a personas y, sobre todo, mascotas, ya que sus pelos tienen efectos urticantes. La procesionaria ataca varias especies de coníferas, como los cedros y alerces, pero principalmente los distintos tipos de pinos mediterráneos. En primavera, a partir de temperaturas de 10 grados, las orugas salen de su letargo en las bolsas blancas de seda que se pueden apreciar en las puntas de las ramas, entonces descienden del pino en procesión para enterrarse bajo el suelo, donde realizarán un capullo dentro del que se transformarán en crisálida, entrando reposo vegetativo. Las mariposas que eclosionen harán varias puestas al final del verano. 

La procesionaria en su fase oruga (larva) está cubierta de pelos urticantes que se desprenden y flotan en el aire, lo que puede producir reacciones alérgicas y, las orugas, ya en el suelo, pueden causar daño por contacto o ingestión. Hace ya años que el Ayuntamiento coloca trampas de captura que son anillos de plástico fijados en altura a los troncos de los árboles. De los anillos cuelga una bolsa con tierra. Una vez las larvas comienzan el descenso desde la bolsa de seda tropiezan con la trampa y creen estar en el suelo. Se entierran en la bolsa que, al ser retirada alberga gran número de larvas, impidiendo su desarrollo a la fase adulta.

Aliados animales para el municipio

Varias son las estrategias para controlar las distintas plagas. En el caso del boj y los castaños de Indias se utiliza un reclamo olfativo. Las trampas de feromonas son unas cajas plásticas de color amarillo en las que se incluye un tubo con feromonas femeninas. Las mariposas macho entran en la trampa buscando a las hembras y se quedan atrapadas sin poder salir. De esta manera se evita la fecundación de hembras y la puesta de huevos, que repetirían el ciclo vital. Estos días se pueden ver colgando de algunos ejemplares de árboles en la ciudad 16 trampas de control y muestreo. En el caso de las coníferas, el Servicio de Zonas verdes procura cortar las puntas de las ramas con bolsones de procesionaria que son accesibles. Se vienen a retirar una media de 50 bolsones al año. Para las orugas ya eclosionadas de bolsones inaccesibles se colocan aros-trampa, de media de 25 a 30 por año.

El Consistorio, además, se alía para esta tarea de control con predadores naturales. Es el caso de las cajas 20 para insectos en los castaños de Indias en donde se desarrollan los dermápteros (llamados coloquialmente cortatijeras, Forficula auricularia) y algunas especies de himenópteros (avispas) se alimentan de los huevos, larvas y pupas, evitando la proliferación de los ejemplares adultos. Las 20 cajas están ubicadas en árboles del Redín y la Taconera.

Pero quizá los mejores ayudantes son los pájaros. Herrerillos, carboneros y colirrojos se alimentan tanto de las larvas, como de las mariposas. El Ayuntamiento de Pamplona, como parte de actividades para centros escolares y asociaciones, coloca cajas nido mediante talleres ambientales. En estos momentos hay 415 cajas nido para diferentes especies de aves, 302 de ellas para páridos, especies insectívoras que se alimentan, entre otros, de plagas.

Zonas especialmente afectadas

Pamplona es una ciudad con una gran superficie arbolada, con más de 60.000 árboles censados de 450 especies diferentes. Además, sus 500 hectáreas de zonas verdes cuentan con macizos arbustivos, de planta vivaz y de temporada (parterres), pasos permeables y setos. Sólo en los parques históricos de Pamplona hay alrededor de 4.000 metros lineales de boj, entre Taconera, Medialuna y Vuelta del Castillo.

La ciudad cuenta con 1.400 castaños de Indias cuyas mayores concentraciones están en Ciudadela-Taconera (280), Primer y Segundo Ensanche (200) y Trinitarios (150). En cuanto a las coníferas, en el término municipal de Pamplona (y en los de las localidades limítrofes) hay gran cantidad de pinares, de hecho, los de Ezkaba y Mendebaldea suman casi 76.000 m2 de los que un 31% son de propiedad municipal. También abundan en la trama urbana pinos calificados como “árboles viejos y singulares” (43) que se distribuyen por el parque de Enamorados, el Psicogeriátrico, Miluze, Hospitales o el Archivo Real y General de Navarra. Hay asimismo cedros gran porte con esta calificación como los 39 censados en parque el Mundo, Taconera, Antoniutti Medialuna, el campus universitario etc.

Pamplona, 30 de marzo de 2023