Victoria rojilla ante el Levante que vale una permanencia (3-1)

Foto: José Ángel Ayerra
Foto: José Ángel Ayerra

Los rojillos vencen con contundencia al Levante gracias a los goles del Chimy Ávila, Budimir y Darko y logran su objetivo de forma virtual.

Victoria rojilla ante el Levante que vale una permanencia (3-1)

El Club Atlético Osasuna venció con contundencia ante el Levante Unión Deportiva y acaricia con los dedos su tercera permanencia consecutiva en LaLiga Santander (3-1). Los rojillos alcanzaron los 38 puntos cuando todavía quedan nueve jornadas para concluir el campeonato, logrando de forma virtual su objetivo. El Chimy Ávila abrió el camino con uno de sus certeros latigazos al filo del descanso, mientras que Budimir y Darko certificarían el triunfo tras una primorosa media hora de juego después del paso por vestuarios. Roger Martí acortó distancias a falta de un cuarto de hora, lo cual permitió a los granotas intentar la heroica hasta el final.

El Sadar bordeó los 20.000 espectadores en una tarde feliz, pero que reservaría su júbilo hasta los instantes finales del primer acto. Ambas escuadras plantearon un partido muy táctico, sin la menor intención de regalar nada a su adversario. Los pupilos de Jagoba Arrasate trataban de ajustar su característica presión ante el esquema de tres centrales del Levante. Por su parte, el conjunto granota amenazaba con sus armas más conocidas. Morales aunó velocidad y precisión en el centro en una acción que acabaría con el balón a escasos centímetros de un Roger que se había situado en boca de gol. Sin embargo, en la recta final del primer tiempo los rojillos comenzarían a inclinar un partido que ya sólo tuvo una dirección.

En un detalle pleno de talento, Rubén García recortó a su par y disparó contra el larguero de la portería defendida por Cárdenas. También estuvo cerca del gol Budimir, con uno de sus característicos cabezazos tras un centro medido del Chimy Ávila. Y sería precisamente el argentino quien desequilibraría el partido antes del paso por vestuarios. Tras un autopase de Darko y la pelea de Budimir en el interior del área, el cuero quedó perdido en zona de máximo riesgo. Y es ahí donde el rosarino no perdona. Empaló con violencia el cuero para hacer estallar al coloso navarro en un único grito.

El robo de Rubén García que dio un golpe al partido

Osasuna inició la segunda parte con la inercia del tanto anotado y no tardaría demasiado en asestar un golpe casi definitivo al encuentro. En el minuto 58, Rubén García mostró su inteligencia y talento para, primero, robar el esférico a Cáceres y, después, dejar a Budimir sólo ante Cárdenas con una asistencia perfecta. Y el croata no perdonó. Alojó el esférico lejos del portero para ampliar la distancia en el marcador. Ahí no acabaría la exhibición rojilla, ya que sólo seis minutos después, Darko Brasanac sentenció definitivamente el duelo con una acción individual en la que derrochó talento y calma para definir de forma certera.

Después de una clara ocasión para hacer el cuarto, el Levante recordó la calidad que atesora en los metros finales a pesar de su situación clasificatoria. Una rápida y precisa acción colectiva fue aprovechada por Rober Martí para marcar el tanto granota, que trajo consigo unos minutos de nerviosismo en los jugadores rojillos. Recobrada la calma, Osasuna volvió a disponer de más opciones de gol en las botas de Kike García. Sin embargo, el marcador ya no se movería más. Los rojillos sumaron su décima victoria de la temporada y abrieron una distancia prácticamente definitiva con las posiciones de descenso.