El exrojillo Jaroslav Plasil debutó el pasado sábado como entrenador en el fútbol profesional, aunque no tuvo la fortuna de llevarse los 3 puntos para su equipo. El Girondins de Burdeos perdió 3-2 frente al Lens, lo que le mantiene en la última plaza de la Ligue 1 francesa.
Precisamente el mal resultado de los de Burdeos es lo que ha aupado al exjugador osasunista a hacerse cargo del equipo, sin embargo, es una situación temporal hasta que encuentren un nuevo inquilino para el banquillo.
Plasil se retiró en 2019 y empezó de entrenador en las categorías inferiores del Girondins. El extremo checo, muy querido por la afición osasunista, llegó a jugar dos temporadas con Osasuna, la 2007/08 y la 2008/09, y uno de sus goles, marcado en la última jornada de liga frente al Real Madrid en el Sadar, es recordado por ser el gol que otorgó la permanencia a los rojillos