El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha afirmado este lunes que España asumirá la presidencia de la Unión Europea en 2023 en un momento "histórico" marcado por la invasión de Rusia a Ucrania y sus consecuencias, una situación que ha calificado de "agresión ilegal e injustificado" de Vladimir Putin al país ucraniano.
En la misma línea, ha sostenido que actualmente con este conflicto se produce "un desafío en la sociedad" y que "lo está en juego no es solamente la soberanía de Ucrania", sino "el enfrentamiento de dos modelos". Además, ha apelado al "diálogo" y a la "unidad" de los europeos para "poder salir juntos" de esta crisis económica y social provocada por la guerra en Ucrania.
Albares ha destacado que las medidas que ha puesto en marcha el Gobierno de España tras la crisis de la Covid y ahora por la invasión rusa son "diferentes" a las de la crisis económica de 2008, que fue "un sálvese quien pueda". "El único objetivo que tienen las medidas que se han tomado es que la paz regrese a Ucrania lo antes posible", ha sostenido.
Igualmente, se ha referido a la próxima presidencia de la UE por parte de España, que "estará marcada sin duda por la guerra de Ucrania y sus consecuencias". Al respecto, el ministro considera que los europeos "esperan que demos lo mejor de nosotros y que tengamos un liderazgo para alcanzar la paz en Europa".
En la misma línea, ha agregado que "si algo nos está demostrando la crisis, es que nos muestra las debilidades, no podemos dejar en manos de terceros que nos chantajeen en cualquier momento, Europa necesita una autonomía estratégica, abierta y tenemos que tener claro cuáles son los cuellos de botella que nos hacen vulnerables para identificarlos".
"Lo que está en juego es el enfrentamiento de dos modelos: uno que tiene los valores de la UE y mira al futuro; que cree en la paz y que erradica la guerra en Europa como método para resolver conflictos. Y otro que representa Putin, que es el del nacionalismo autoritario, que mira a otros momentos de muros y alambradas, a diferencia de los valores europeos", ha expresado.
Albares ha explicado que "hay sociedades en Europa que ven en Putin un reflejo", por lo que ha resaltado la "importancia" de foros como el que se ha celebrado en Alicante y que tengan como objetivo "construir juntos la única forma de hacer frente a esta crisis de Ucrania".
"Ni el Gobierno de España, ni la Unión Europea, ni la OTAN, ni los aliados de la OTAN han querido esta guerra, ni han empujado a nadie a esta guerra. Hemos estado en la mesa del diálogo y negociación, donde seguimos sentados esperando que Rusia vuelva algún día, y desde luego, todo lo que hacemos tiene como objetivo limitar la capacidad de que Vladimir Putin siga adelante con su guerra y que la paz regrese lo antes posible", ha sostenido.
Para finalizar, ha recordado que el Gobierno "desde el primer momento" está creando "un escudo social para los españoles y para proteger también a nuestras empresas".
"No podemos prometer que Vladimir Putin, y no podemos ser optimistas al respecto, diga a los soldados rusos que regresen dentro de sus fronteras de donde nunca debieron de salir, pero lo que sí les podemos garantizar con hechos, y lo están viendo igual que ocurrió durante la crisis del Covid-19, es que junto con nuestros socios europeos vamos a proteger a los españoles y a las empresas tanto como sea necesario", ha dicho.
CHINA
Paralelamente, Albares se ha referido al papel que juega China en el mercado internacional y ha apelado a que ejerza un papel "moderador" y "pacificador" con Putin. "Es a lo que está llamado y lo que espero de China. Lo que espero es que participe de manera constructiva y participativa en la paz", ha zanjado.
