La dirección de Volkswagen Navarra ha resaltado hoy la flexibilidad de la fábrica para producir simultáneamente coches de combustión y eléctricos desde 2026, y ha ratificado la previsión de altos volúmenes de producción a partir de 2027, con hasta 350.000 coches en ese año y en 2028, y con la posibilidad de alcanzar los 390.000 con medidas de flexibilidad acordadas.
En el transcurso de la cuarta reunión de la mesa negociadora del X Convenio Colectivo, el gerente de Relaciones Industriales, Jesús Galindo Parejo, ha asegurado que “el proceso de conversión del sector industrial de la automoción hacia la movilidad sostenible basada en el coche eléctrico hace necesaria una transformación de Volkswagen Navarra hacia esta realidad”. El directivo ha sostenido que en este contexto “es necesario apostar nuevamente por una transformación flexible de la fábrica de forma que sea posible y conviva la fabricación de coches eléctricos con los de combustión” para que esa flexibilidad “sea garantía adicional ante las oscilaciones del mercado”.
Galindo ha apostado por la realización de “planes acordados de salidas incentivadas definiendo criterios comunes para su elección, con el objetivo de mejorar el absentismo y la estructura de la plantilla”. Ha recordado que se “aplicará el contrato relevo manufacturero, siempre que esté en vigor, así como el sistema de bajas voluntarias”. Y ha concluido: “De no existir el contrato relevo manufacturero, empresa y parte social acordarán medidas para dar prioridad de salida a los trabajadores de más edad”.
Por su lado, el director de Ingeniería de Planificación, David García Castaño, ha informado de que “se están realizando las inversiones necesarias en instalaciones y producto durante el proceso de transformación hacia los coches eléctricos (2023/2026) para garantizar los dos lanzamientos en este último año y la capacidad productiva industrial actual”. En el transcurso de su intervención ha repasado el estado actual de las obras y el plan de ejecución venidero.
