Adiós a Txumarra, responsable de montaña de la SCDR Anaitasuna

Foto y agradecimiento: Anaitasuna
Foto y agradecimiento: Anaitasuna
Por su interés reproducimos el obituario que le han dedicado desde la S.C.D.R. Anaitasuna a uno de los grandes del montañismo en Pamplona y Navarra
Adiós a Txumarra, responsable de montaña de la SCDR Anaitasuna

La montaña navarra está de luto, tras la reciente muerte de Jesús María Garísoain Goñi, conocido como Txumarra, nacido en Álava en 1948, aunque de niño recaló en Navarra, donde vivió por y para la montaña.

La montaña fue sin duda la inmensa pasión de este hombre, que ha fallecido después de varios meses luchando contra unas complicaciones de salud. Entró en la S.C.D.R. Anaitasuna cuando la sociedad todavía se encontraba en la calle Mayor y heredó la sección de Montaña en la década de los setenta del siglo pasado.

A lo largo de los años al frente de este grupo, revitalizó de una forma incansable todas las actividades de la sección, creando algunas de las citas que hoy en día son actos indiscutibles del calendario navarro, como la Travesía del Pirineo, la Marcha a San Cristóbal o la Semana de Cine de Montaña.

Casado y con un hijo, sus comienzos laborales estuvieron en un taller de materiales metálicos, aunque el recuerdo de todos los que lo conocían se asocia a la tienda de deportes Mendi Kirolak, donde estuvo trabajando hasta que, en el año 1996, sufrió un accidente cuando un coche le impactó mientras circulaba en motocicleta.

Ese siniestro le cambió la vida, ya que desde ese momento estuvo aquejado de molestias en la cadera, lo que le impidió disfrutar tanto de lo que, para él, era la parte más importante de su vida: la montaña. No obstante, nada le separaba de esa inmensa afición. De hecho, a pesar de no poder realizar las excursiones dominicales, acudía a todas y se pasaba el día junto al chófer del autobús, para así, al menos, estar cerca de la naturaleza y del monte.

CONSTANCIA Y RESPETO

Perseverancia, dedicación, constancia y respeto son algunos de los términos que les vienen a la cabeza a quienes compartieron con él tantos años en la sección de Montaña. Era tan firme e insistente que, si algo se le metía en la cabeza, no paraba hasta conseguirlo. Aunque, para ello, tuviera que llamar al director de Telefónica o al jefe de la Policía Foral para obtener los permisos necesarios. Así lo describen sus amigos, como una persona obstinada en sacar adelante aquello que consideraba esencial para potenciar la sección en Anaitasuna, siempre con la montaña en sus pensamientos.

Esas cualidades de nunca rendirse y de no tener remilgo alguno para pedir ayuda a quien fuera son también dos observaciones que salen a la palestra cuando los que lo conocían hablan de él con cariño, respeto y admiración. Por eso, seguramente, llegó a organizar tantas excursiones y tantos eventos relacionados con la montaña. No pensaba en otra cosa, apuntan sus amistades más cercanas; solo te hablaba de los libros de montaña que había leído o de las películas de montaña que había visto. Era, sin duda, la pasión de su vida.

Desde la S.C.D.R. Anaitasuna, queremos mandar nuestro abrazo más afectuoso y cercano a sus seres queridos y a la infinita lista de amistades y contactos que seguro lo echarán de menos. Descanse en paz.