Irache gana varias sentencias por entrega de bonos de aerolíneas tras cancelación de vuelos durante la pandemia

Una persona con mascarilla pasa junto a la entrada de la sala de llegadas 1 de la Terminal 1 del Aeropuerto de Barajas, en Madrid (España) - Jesús Hellín - Europa Press
Una persona con mascarilla pasa junto a la entrada de la sala de llegadas 1 de la Terminal 1 del Aeropuerto de Barajas, en Madrid (España) - Jesús Hellín - Europa Press
 Muchas compañías ofrecieron únicamente bonos que permitían a los clientes usar el dinero de los billetes en otros vuelos de la empresa
Irache gana varias sentencias por entrega de bonos de aerolíneas tras cancelación de vuelos durante la pandemia

La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha ganado varias sentencias contra compañías aéreas que habían ofrecido bonos a sus pasajeros como única opción cuando se había cancelado el vuelo. Tras llevar el caso a los tribunales, se ha conseguido que las aerolíneas devuelvan el importe de los billetes.

Irache ha explicado en una nota que a partir de la llegada de la pandemia de Covid-19 y la declaración del estado de alarma, multitud de vuelos tuvieron que ser cancelados, desde trayectos nacionales o viajes a otros países o continentes. Muchas compañías ofrecieron únicamente bonos que permitían a los clientes usar el dinero de los billetes en otros vuelos de la empresa.

"Pese a que la normativa europea reconoce el derecho del consumidor a recuperar el dinero del billete en caso de cancelación, las empresas no informaban convenientemente de esta opción, seguramente para tratar de evitar una pérdida notable de ingresos", ha explicado la asociación.

Así, muchas personas afectadas por estas situaciones acudieron a Irache para asesorarse. Desde la asociación se reclamó a las aerolíneas la devolución íntegra del dinero de los billetes en lugar del bono ofrecido. En algunos casos las empresas accedieron al pago, pero en otros muchos no fue así y desde Irache se planteó la posibilidad de defender sus derechos ante los tribunales.

Algunos de estos consumidores ya están viendo cómo los jueces obligan a las compañías a devolver el dinero. Es el caso de un vuelo para ocho personas de Pamplona a Nueva York, con escala en Madrid. La compañía solo ofreció el bono. Los afectados, disconformes tras reclamar la devolución sin ningún resultado, lo acabaron llevando a los tribunales, donde finalmente les dieron la razón y obligaron a la compañía a devolver el coste íntegro de los billetes, que superaba los seis mil euros.

Otro caso ganado, por ejemplo, es el de una pareja que vio cómo se suspendía su vuelo de ida y vuelta de Madrid a Lima. Tras no aceptar el bono que le ofrecía la compañía y sin que esta aceptase devolver el dinero, tuvo que ser un tribunal el que obligó a la aerolínea a reintegrar a los consumidores los más de 1.500 euros que pagaron por el viaje.

Irache ha destacado que, "aunque la normativa reconoce el derecho de los consumidores a recuperar el dinero pagado en caso de cancelación -hablamos siempre de vuelos contratados de forma independiente, no en un paquete con alojamiento u otro tipo de servicios-, muchas compañías no informaron de este derecho con la suficiente claridad". "Por teléfono, solo indicaban la posibilidad del bono o de cambio de fechas", ha señalado.

En el mensaje en el que informaban de la cancelación se ofrecía en todo momento el bono, "incluso con expresiones que podían resultar engañosas y llevar a pensar al consumidor que recuperaría su dinero, como reembolso por bono". "No había una indicación clara de que el cliente pudiese optar por que le devolvieran el dinero del vuelo. Una vez que el consumidor aceptaba el bono, la compañía se excusaba en ello para no devolver el dinero. En otros casos, aun sin aceptación expresa del bono por parte del consumidor, la compañía tampoco ha aceptado devolver el dinero", ha apuntado la asociación.

Desde Irache han considerado que "son necesarios una mayor exigencia y control para que las compañías respeten los derechos de los clientes sin que éstos tengan que llegar a los tribunales para ejercerlos, con la consiguiente demora en el tiempo y desgaste personal".