Nueva propuesta para el ‘Eje sostenible de Labrit’

Archivo - Una persona monta en bicicleta durante el día 94 del estado de alarma - Foto: Eduardo Sanz - Europa Press - Archivo
Archivo - Una persona monta en bicicleta durante el día 94 del estado de alarma - Foto: Eduardo Sanz - Europa Press - Archivo
Nueva propuesta para el ‘Eje sostenible de Labrit’

La configuración del tráfico en la zona entre el frontón Labrit y el cruce con la calle Amaya permanecerá como está actualmente, salvo por la continuidad del carril bus exclusivo hasta el cruce con Amaya y la reserva del carril izquierdo de bajada

La Junta de Movilidad ha visto hoy una nueva propuesta para el llamado eje sostenible de Labrit en el que se pretende dar solución a los distintos modos de desplazamiento de manera eficiente y segura, introduciendo un carril bici sin afectar a los desplazamientos peatonales y favoreciendo el transporte público en la circulación de subida desde el barrio de Txantrea al II Ensanche. El objetivo es ofrecer alternativas sostenibles y eficaces para motivar el cambio modal hacia medios más sostenibles, es decir, el cambio de viajes que actualmente se realizan en transporte privado motorizado, por viajes en transporte público o a pie y también en bicicleta, una opción saludable para quienes la utilizan y para el conjunto de la ciudad porque no genera contaminación atmosférica ni acústica.

El carril bici conectará los dos barrios desde el cruce de la calle Juan de Labrit con la calle Amaya y hasta el cruce de la calle Magdalena con la calle Lumbier, discurriendo por la Cuesta de Labrit y el puente del Vergel hasta llegar a conectar con la pista bici en construcción en el nuevo vial de borde de la urbanización de Txantrea Sur y también con la pista bici de la zona de Alemanes, ya dentro del barrio, al otro lado del río, de manera que se completa un itinerario de casi 1 kilómetro y medio.

El carril bici discurrirá por la derecha en dirección a la meseta, desde la conexión con el carril de Alemanes, hasta la nueva rotonda de Txantrea Sur y la conexión con la pista bici del nuevo parque. Después, continuará por el margen izquierdo de subida hasta el frontón Labrit donde se crea un nuevo paso peatonal y ciclista semaforizado que permite continuar el itinerario ciclista hasta la intersección con calles Amaya y Duque de Ahumada, a través de la bolsa de aparcamiento y la acera amplia del último tramo mediante solución de acera bici en paralelo al muro.

El tramo recto entre la calle Lumbier y el vial de Txantrea Sur será de sección reducida y en la rotonda, el carril bici sube únicamente a la acera para bordear la rotonda como acera bici porque no tiene cabida en la calzada, y hasta conectar con la pista bici que acompaña al vial de Txantrea Sur. En la calle Magdalena, en su desarrollo hacia el Camino de Caparroso, se instalará una parada de autobús avanzada en sentido bajada y el carril bici se situará sobre ella; se hará, asimismo, un paso ciclista en ese camino. Desde el Camino de Caparroso hasta Vergel, el actual carril de subida se desdoblará para permitir el giro a la derecha, reduciendo la sección, tanto del carril bici, como de los carriles motorizados.

El carril bici en el tramo de subida de la Cuesta de Labrit se ejecutará rompiendo la actual acera izquierda en sentido subida, muy poco utilizada por los peatones, para situarlo en calzada, pero segregado del tráfico a través de elementos separadores que garanticen la seguridad de los ciclistas. En toda la cuesta habrá también un carril motorizado de subida y uno de bajada y se controlará la velocidad del tráfico, en la que se instalará un radar de control de velocidad, para garantizar que se cumple el límite de 30 km/h, para alcanzar un tráfico calmado en paralelo al ciclista.

Tránsito peatonal y transporte público

La solución para el tránsito peatonal se concreta en el acondicionamiento del camino que atraviesa el parque por el que actualmente sube el 90% de los peatones, conectando con una acera volada con posibles miradores que complete el itinerario peatonal desde la mitad de la curva y hasta la acera de Juan de Labrit a la altura de la pasarela y el nuevo paso de peatones semaforizado, junto al frontón Labrit. En el cruce de Vergel se dispondrá una acera que vaya desde la senda del parque hasta el cruce peatonal con la llamada Playa de Caparroso. La acera de la derecha de subida, se mantiene como alternativa.

La ventaja para el transporte público se concreta en unir Amaya y Vergel con un carril bus exclusivo, además de incorporar la priorización semafórica en los tres grupos de semáforos, cruce de Vergel, paso peatonal y ciclista semaforizados a la altura del frontón Labrit y cruce con calle Amaya.

Tráfico rodado

La configuración del tráfico en la zona entre el frontón Labrit y el cruce con la calle Amaya permanecerá como está actualmente, salvo por la continuidad del carril bus exclusivo hasta el cruce con Amaya y la reserva del carril izquierdo de bajada para el giro a la izquierda de entrada a la calle San Agustín y la bolsa de aparcamiento frente al frontón, bolsa que tendrá una única entrada, siendo anulada la de giro a derecha de subida a continuación del frontón para garantizar la seguridad del tránsito peatonal y ciclista.

Esa configuración del tráfico se mantiene ya que, previamente, se ha encargado un estudio de tráfico a una empresa especializada que ha actualizado el modelo de tráfico de Pamplona a escala “macro” para analizar las afecciones que podrían provocar en distintas zonas de la ciudad y de la comarca las soluciones de reducción de la capacidad de la vía que se han barajado anteriormente. En concreto se han estudiado las posibles afecciones en la ronda norte en la rotonda donde desemboca la calle San Cristóbal y en las dos subidas alternativas a la meseta desde los barrios de Rochapea y Txantrea, la Cuesta de Beloso y la Cuesta de La Reina.

Los resultados aconsejan mantener la capacidad en ese tramo final, pero permiten actuar en el puente del Vergel reduciendo la sección de la vía para incorporar el carril bici y, en la Cuesta de Labrit hasta el frontón, destinando exclusivamente al transporte público uno de los dos carriles actuales de subida y limitando por tanto a un único carril motorizado para el tráfico privado.

El estudio ha analizado un escenario en el que se reduce la capacidad de la vía hasta la calle Amaya en un único carril motorizado de subida compartido por transporte público y privado, sustituyendo ese carril por el carril bici y han concluido que de los más de 10.000 vehículos/día que suben por Labrit, únicamente 2.600 dejarían de hacerlo con la reducción de la capacidad de la vía completa (desde el cruce del Vergel hasta el cruce con Amaya) buscando vías alternativas. El resto, más de 7.000 vehículos seguirían utilizando la Cuesta de Labrit, a pesar de tener demoras de entre 4 y 6 minutos porque no encontrarían alternativas o por tener su destino final de viaje en zonas próximas del Ensanche o Casco Antiguo. Así, esta reducción no sería suficiente para absorber el tráfico, especialmente en horas punta, y provocaría demoras significativas no asumibles en el transporte público, más en un eje sostenible. El traslado de los 2.600 vehículos a otras zonas buscando vías alternativas, afectaría además de manera significativa a la Cuesta de Beloso y a la Cuesta de La Reina, actualmente en situación cercana a la saturación.