LA EMOCIÓN DE SENTIR LA MÚSICA Este innovador testeo se realizó con tres personas asociadas de ASORNA con sordera profunda, César Linares, Katerin Yuniet y Jorge Castro, y con el asesoramiento de Fundación Iddeas (especializa en formación en inclusión y accesibilidad). En la visita a la exposición, que incluía instalaciones artísticas de luz y sonido, contaron con el apoyo de una intérprete, Socorro Arrarás, quien ha compartido que las tres personas participantes transmitieron un resultado “sumamente positivo” y expresaron que nunca habían experimentado algo similar. “La emoción de percibir sensaciones más allá del sentido de la vista fue una experiencia nueva y poderosa para estas personas”, explica Arrarás. En concreto, para Jorge Castro, que acudía a Baluarte por primera vez, la experiencia resultó “muy gratificante y novedosa”. Una opinión que compartió Katerin Yuniet: “Es la primera vez que he experimentado algo así. Debido a mi sordera no puedo escuchar música y sentir las diferentes vibraciones me ha ayudado a integrar mejor la exposición. Ha sido muy emocionante”. Por su parte, César Linares apuntó que oportunidades como la brindada por Baluarte es fundamental para que personas como él, con discapacidad auditiva, puedan disfrutar de actividadades culturales como el resto de la ciudadanía: “Los chalecos nos han ayudado a mejorar la experiencia, ha sido precioso. Ojalá poder potenciar más actividades como esta”. Este resultado subraya la importancia de las mochilas vibratorias como una herramienta que enriquece la experiencia cultural, permitiendo una interacción más completa e inclusiva para las personas con discapacidad auditiva. En esta línea, Baluarte, comprometido con su Plan Integral de Accesibilidad, tiene previsto adquirir varias mochilas vibratorias a finales de 2023 o principios de 2024. Esta inversión, que se realizará para el conjunto de NICDO, permitirá que personas con discapacidad auditiva disfruten plenamente de las actividades culturales de la sociedad pública dependiente del Gobierno de Navarra. “Debemos aspirar a que Baluarte y todas las sedes de NICDO sean espacios inclusivos en el más amplio sentido del significado, garantizando la posibilidad de que cualquier persona, con o sin problemas de movilidad o percepción sensorial, puedan entender nuestros espacios, integrarse en ellos y, además, interactuar con los contenidos que ofrecemos. El objetivo es muy claro, trabajar para que el tan habitual ‘Apto para todo Público’ sea realmente accesible para todos y todas. No es algo que se consiga de un día para otro, pero por ello nuestra estrategia a futuro nos marca una hoja de ruta clara, constante en el tiempo, para la consecución de este fin”, concluye Noya. Con la adquisición de estos chalecos vibratorios, Baluarte seguirá avanzando con su Plan de Accesibilidad universal. De la mano de la Fundación Iddeas, el Plan continuará con la fase de análisis por medio del Inclusímetro, con formación en comunicación y atención inclusivas, y con la puesta en marcha del proyecto NaviLens Baluarte (señalización universal).
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