Tras la participación en la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, el consejero de Salud del Gobierno de Navarra, Fernando Domínguez (Geroa Bai), ha compartido las perspectivas y decisiones tomadas en el encuentro matutino. Uno de los temas centrales abordados fue la discusión sobre las medidas relacionadas con el uso de la mascarilla.
Desde Navarra, Domínguez indicó que mantienen su postura de intensificar la recomendación del uso de mascarillas en determinados ámbitos. En concreto, se refirió a la necesidad de su uso en espacios sociosanitarios, en entornos sanitarios y para aquellas personas que presenten síntomas respiratorios y tengan la intención de permanecer en espacios cerrados. Esta postura ha sido compartida por la mayoría de las comunidades autónomas, aunque hasta el momento no se ha alcanzado un acuerdo definitivo en el Consejo Interterritorial.
El consejero informó que el Ministerio de Salud ha emplazado a las autoridades a una nueva reunión a lo largo de la semana para continuar las negociaciones y llegar a consensos sobre las medidas a implementar.
En cuanto a la situación actual en Navarra, Domínguez destacó un aumento de la presión asistencial, especialmente en los servicios de urgencia. Sin embargo, señaló que este incremento se encuentra dentro del rango registrado en las ondas estacionales de gripe de algunos años anteriores de la última década. Es importante destacar que estos niveles están lejos de alcanzar la magnitud de las ondas de COVID durante la pandemia.
El consejero también resaltó la buena cobertura de la vacuna contra la gripe en Navarra. Informó que el 79% de la población mayor de setenta y cinco años ha sido vacunada, así como el 71.7% de los mayores de sesenta y cinco años. Estas cifras indican un alto grado de aceptación de la vacunación entre los grupos de mayor riesgo.
A pesar de la situación actual, con el reinicio de las clases y la normalización de la actividad laboral, se espera un aumento en las tasas de incidencia en grupos de edad más jóvenes. Sin embargo, se prevé que este aumento no tenga un impacto significativo en los grupos de mayor riesgo gracias a la cobertura vacunal existente.
Domínguez anticipó que "probablemente queden dos o tres semanas de circulación gripal intensa", siguiendo el patrón de una temporada típica de gripe. No obstante, expresó la posibilidad de que "la repercusión en casos graves haya alcanzado su punto máximo en la semana actual".
A pesar de este panorama, el consejero subrayó la importancia de "seguir recomendando el uso de mascarillas en las situaciones mencionadas como medida preventiva y adecuada para controlar la propagación del virus".
Así las cosas, la próxima reunión entre las autoridades de salud a lo largo de la semana será crucial.
