Homenaje a las víctimas del terrorismo junto al monumento en la Plaza de la Constitución

Foto: Un momento del homenaje a las víctimas
Foto: Un momento del homenaje a las víctimas

En el acto, la voz de las víctimas se alzó para expresar su dolor y su descontento ante el silencio impuesto. La imagen simbólica de dar la espalda al público mientras se leía parte del discurso reflejaba la sensación de ser ignoradas y marginadas, una metáfora visual de su visión de "cómo algunos intentan relegar a las víctimas del terrorismo a un segundo plano"

Homenaje a las víctimas del terrorismo junto al monumento en la Plaza de la Constitución

En la emblemática Plaza de la Constitución de Pamplona, el 11 de febrero se llevó a cabo un conmovedor acto de homenaje a las víctimas del terrorismo, organizado por la asociación ANVITE y presentado por Pilar Ollo, su presidenta. El evento contó con la lectura del comunicado a cargo de Luis Álvarez Atarés, nieto del General Juan Atarés, ante un público que se congregó para recordar y rendir tributo a aquellos que sufrieron las consecuencias de la violencia perpetrada por la banda terrorista ETA. La convocatoria ha estado respaldada por ANVITE, la Fundación Tomás Caballero, Vecinos de Paz, ¡Libertad Ya!, Sociedad Civil Navarra, Pompaelo, Doble 12, Ego Non, Recuperar Navarra, y la Asociación por la Tolerancia. 

En el acto han recordado que "hace nueve años, el Parlamento de Navarra aprobó un texto que condenaba enérgicamente los crímenes de la izquierda abertzale y de ETA, reconociendo la limpieza nacional, los crímenes contra la humanidad y los actos de genocidio cometidos en el País Vasco y Navarra". Además, proclamaba el 11 de febrero como el "Día en memoria de los desplazados forzosos por ETA y de todas sus víctimas de crímenes contra la humanidad". En ese momento, la sociedad y los representantes políticos se unían en la condena al terrorismo, demostrando una postura firme contra la lacra que representaba ETA.

En el comunicado han asegurado que "hoy, en vez de querer aclarar los crímenes impunes se ceden competencias y se negocian leyes que no buscan sino enterrar el pasado manchado de sangre y pasar página. Más que eso, de arrancar todas laspáginas de la historia de quienes terminaron con 850 vidas de las que más de 300 siguen sin conocer qué ocurrió.

En el acto, la voz de las víctimas se alzó para expresar su dolor y su descontento ante el silencio impuesto. La imagen simbólica de dar la espalda al público mientras se leía parte del discurso reflejaba la sensación de ser ignoradas y marginadas, una metáfora visual de su visión de "cómo algunos intentan relegar a las víctimas del terrorismo a un segundo plano".

Los presentes destacaron la importancia de recordar que la condición de víctima no es una elección, sino una imposición impuesta por el dolor, el miedo y el terror. Las críticas y desprecios hacia las víctimas, provenientes incluso de algunas autoridades, generan en su opinión un profundo dolor y frustración. Se denunció la indignidad de otorgar protagonismo a aquellos que fueron verdugos al frente de instituciones públicas, mientras se niega a las víctimas el reconocimiento y la legitimidad que merecen.

Las víctimas del terrorismo reafirmaron su independencia de cualquier partido político y proyecto político, recordando que su lealtad está "exclusivamente con aquellos cuyas vidas fueron arrebatadas por el terrorismo" e hicieron  hincapié en la necesidad de no permitir que los crímenes sean olvidados o minimizados por conveniencias políticas.

Finalmente pidieron a las autoridades "mirar a los ojos de las víctimas y a responder si realmente vale la pena el blanqueo del terrorismo por intereses de poder" y advirtieron sobre "los daños morales irreparables que esta práctica puede generar en la sociedad, especialmente para las generaciones venideras".

En el cierre del emotivo acto, se reafirmó el compromiso de las víctimas de "no ser silenciadas"y de seguir exigiendo "verdad, memoria, dignidad y justicia para honrar a sus seres queridos".