Civivox Condestable acogerá este lunes, a las seis de la tarde, una jornada organizada por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y el Ayuntamiento de Pamplona para dar a conocer las medidas adoptadas por ambas entidades con el objetivo de reducir y minimizar el riesgo de inundaciones en la ciudad. La charla, que dará comienzo a las 18 horas, está abierta al conjunto de la ciudadanía, si bien es necesario realizar inscripción previa a través de este enlace.
El encuentro servirá para presentar el Plan de Gestión de Riesgo de Inundación del Ebro (PGRI) e informar sobre qué es y qué supone dicho plan, qué medidas se prevén y cómo puede la ciudadanía implicarse en la gestión del riesgo de inundación. Así, el PGRI del Ebro es un documento de referencia para todas las Administraciones y para la sociedad en general que tiene como objetivo disminuir el efecto negativo de las inundaciones fomentando la autoprotección y la coordinación. El documento recoge medidas por un importe de más de 300 millones de euros, que se ejecutarán hasta 2027.
De hecho, el Plan de Gestión del Riesgo de Inundación apuesta por la prevención, la protección, la preparación y la recuperación como herramientas fundamentales para minorar los daños de inundación, no solo materiales sino también personales, y resalta la importancia de lograr la implicación de todas las partes para evitarlos. Para Navarra, este plan contempla 36 medidas específicas, muchas de ellas fruto de colaboración cooperación interadministrativa. Se trata de medidas de mejora de la capacidad predictiva, de medidas de fomento de la autoprotección e incremento del conocimiento y de medidas para minimizar el riesgo de inundación a través de la restauración fluvial.
Entre las actuaciones previstas destacan medidas encaminadas a incrementar la percepción del riesgo de inundación entre la ciudadanía, pero también la mejora de la coordinación entre administraciones y de la capacidad predictiva ante situaciones de crecida e inundaciones.
Otras medidas de prevención pasan por mejorar la ordenación del territorio, disminuyendo la exposición en zonas inundables, y reducir la vulnerabilidad de los elementos ubicados en estas zonas. Pamplona, de hecho, ha diseñado en los últimos años un bosque de crecida en Aranzadi y está trabajando en mejorar los drenajes del entorno del parque fluvial, de la mano del proyecto RUNA 2025, entre otras actuaciones.
