El Seprona consiguió averiguar, a través de pruebas de ADN, el perfil genético de la madre de los cachorros. Tras cruzar los datos con el registro de animales identificaron al dueño y posible autor…
Un vecino descubrió los cachorros en un contenedor, de los que siete estaban muertos y sólo uno había sobrevivido, aunque se encontraba frío y tembloroso