Las estafas online aumentan durante la pandemia

Las estafas online aumentan durante la pandemia

La pandemia global ha acelerado un cambio de hábitos que nos ha impulsado cada vez más hacia el ámbito digital, algo que ya había comenzado hace varios años, sobre todo con el apogeo de los smartphones y nuevos dispositivos informáticos portátiles como las tablets. Poco antes del inicio de la pandemia, además, estábamos experimentando el boom de los wearables, y durante los últimos meses hemos incorporado a todo eso una nueva cultura del teletrabajo y el estudio a distancia que parece haber llegado para quedarse.

Las ventajas del entorno digital

El incremento de la cultura online nos trae una serie de ventajas tanto a nivel personal como medioambiental. Además de permitirnos administrar mejor nuestro tiempo y conciliar mejor nuestra vida familiar y laboral, también reduce el tránsito en las ciudades y, en consecuencia, la contaminación por las emisiones CO2 del tráfico rodado. Además, para las empresas también favorece el acceso a trabajadoras y trabajadores cualificados de diversas partes del mundo, lo que les permite seleccionar a su personal entre una bolsa de talento mucho mayor.

Los peligros de esta transición

Sin embargo, esta digitalización progresiva de nuestro día a día también aumenta la cantidad de ciberataques y estafas online que experimentamos, ya que, a medida que nuestro dinero fluye cada vez más en el ámbito digital, los estafadores también se instalan cada vez más en este ámbito para tratar de ganar dinero a costa de las personas despistadas o con poca experiencia en materia de ciberseguridad.

Las estafas más populares

Hay muchos tipos de estafas circulando por internet, y estas se renuevan continuamente. Algunas de las más populares son las siguientes:

  • El phishing. El phishing en realidad es un tipo de estafa muy genérica que abarca muchos tipos de ataques diferentes, pero esencialmente consiste en todo tipo de ciberataque donde un hacker se hace pasar por una institución o una persona de confianza para robar nuestros datos privados o bancarios. Esto puede hacerse falsificando una web, un correo electrónico, o de muchas otras formas.
  • El smishing. Especialmente popular en los últimos meses, el smishing es un tipo de estafa donde recibiremos un mensaje de alguien haciéndose pasar por una empresa de mensajería o algún servicio online, adjuntando un enlace donde se nos invitará a hacer clic para realizar una transacción o facilitar nuestros datos privados, que, por supuesto, son luego utilizados de forma ilegítima por el atacante.
  • Los bots de Bitcoin. En los últimos meses están proliferando por internet una serie de estafas que nos invitan a invertir 250 euros en diferentes bots de Bitcoin para obtener grandes ingresos en un tiempo récord. La mayoría de estas plataformas en realidad son esquemas piramidales donde el dinero termina en manos de un estafador, y el resto de personas afectadas simplemente lo pierden.
  • Alojamientos falsos. Los alojamientos falsos son estafas que proliferan especialmente durante periodos vacacionales. Con este tipo de estafas, intentaremos alquilar un alojamiento en plataformas de reserva online, pero, a llegar a nuestro destino, el alojamiento no existe, con lo que la inversión termina quedando perdida.

¿Cómo protegerse frente a este tipo de estafas?

Las estafas online pueden aparecer de muy diversas formas, así que es importante contar con diversas medidas de seguridad y ser muy prudentes a la hora de navegar por la red. Además de nuestro sentido común, algunas de las herramientas de ciberseguridad indispensables son los antivirus –para proteger nuestros dispositivos frente al malware– y una VPN. Por dar ejemplo,  la mayoría de usuarios de Redes Privadas Virtuales tiene opiniones sobre NordVPN muy positivas.

A la hora de navegar por internet debemos ser conscientes de que numerosos hackers y estafadores tratarán de hacerse con nuestros nombres de usuario y contraseña, así como nuestros datos bancarios. En este sentido, es fundamental corroborar siempre la procedencia legítima de las plataformas online en las que realicemos nuestras gestiones y de los remitentes de los correos electrónicos o SMS que recibamos. Todo esto nos permitirá navegar de forma más segura y mantener nuestros datos bancarios protegidos.