Los hogares navarros tuvieron en 2020 unos ingresos netos medios anuales de 35.430 euros, un 0,4% más que en 2019

Foto: Zona comercial del Ensanche
Foto: Zona comercial del Ensanche

El porcentaje de población en riesgo de pobreza aumentó una décima y se sitúa en el 21,3%

Los hogares navarros tuvieron en 2020 unos ingresos netos medios anuales de 35.430 euros, un 0,4% más que en 2019

Los ingresos netos medios anuales de los hogares navarros alcanzaron los 35.430 euros en 2020, lo que supone un incremento del 0,4% respecto al año anterior, según ha informado el Instituto de Estadística de Navarra (Nastat).

Según añade, existieron diferencias en la renta anual neta por hogar dependiendo de que el perceptor principal fuera hombre o mujer. Si el perceptor principal era hombre, los hogares tuvieron unos ingresos medios de 38.262 euros, concentrándose en su mayor parte en los estratos de rentas intermedios y altos, mientras que, si era mujer, la renta por hogar se situó en 31.146 euros y se concentró en los estratos bajos; en el estrato de 9.001 a 12.000 euros se situó el 8,9% de estos hogares.

La renta disponible de cada persona estuvo determinada, entre otras variables, por el sexo y la edad. Estas diferencias repercuten también en la renta anual neta media por unidad de consumo que fue ligeramente superior para los hombres. Además, los valores más elevados correspondieron a personas de 65 y más años.

POBLACIÓN EN RIESGO DE POBREZA

La tasa de riesgo de pobreza se situó en el 21,3% de la población navarra, frente al 21,2% registrado el año anterior, es decir, se produjo un incremento de una décima porcentual. La población en riesgo de pobreza es un indicador relativo que mide desigualdad, es decir, no mide pobreza absoluta sino cuántas personas tienen ingresos por debajo del umbral de pobreza en relación al conjunto de la población, ha detallado el Nastat.

Respecto a 2019, destaca el incremento de esta tasa de 1,1 puntos porcentuales para los hombres con edades comprendidas entre 16 y 29 años y para las mujeres en ese mismo grupo de edad 6 décimas porcentuales, y el descenso de ocho décimas porcentuales para los hombres de 65 y más años y de 1,2 puntos porcentuales para las mujeres del mismo grupo de edad.

Por edades, la mayor tasa de riesgo de pobreza correspondió a las personas menores de 16 años siendo 8,5 puntos superior a la del conjunto de la población; por sexo se dio una diferencia de 2,6 puntos porcentuales, siendo mayor en las mujeres, y explicándose fundamentalmente por que entre la población de 65 y más años los ingresos medios por pensiones que constituyen la principal fuente de renta en estas edades, son notablemente inferiores entre las mujeres, 11.091 euros frente a los 19.167 euros registrados para los hombres.

El umbral de pobreza con datos económicos relativos a 2020 se situó en 11.549 euros (calculado a partir de la renta neta por unidad de consumo), registrando un ligero aumento con respecto al año anterior, en el que se situó en 11.528 euros. En hogares compuestos por dos adultos y dos menores de 14 años se situó en 24.253 euros frente a los 24.209 euros del año anterior.

Según la nacionalidad, el porcentaje de personas por debajo del umbral de riesgo de pobreza era del 16,4% para las de nacionalidad española, del 43,5% para las personas con nacionalidad de la Unión Europea (UE-27) exceptuando España y del 65,3% para las personas cuya nacionalidad no era de un país de la UE-27.

Si se considera el umbral de riesgo de pobreza obtenido en la última Encuesta de Condiciones de Vida llevada a cabo por el INE para el conjunto de España (con datos económicos relativos al año 2019) situado en 9.626 euros, la tasa de pobreza de la Comunidad foral desciende al 15,9%, 5,4 puntos porcentuales inferior a la registrada considerando nuestro umbral de pobreza, ha indicado Nastat.

DISTRIBUCIÓN DE LA RENTA SEGÚN FUENTE DE INGRESOS

Se consideran cinco categorías: salarios, pensiones, prestaciones por desempleo, otras prestaciones (dependencia, incapacidad, rentas mínimas de inserción...) y otros ingresos (capital mobiliario, bienes inmuebles, actividades económicas...).

Los salarios constituyen el ingreso más importante, el 57,4%, seguido de las pensiones, el 25,5%, otros ingresos, el 8,7%, prestaciones por desempleo, el 4,6% y otras prestaciones, el 3,8%.

Se observa que para el conjunto de personas en riesgo de pobreza los ingresos procedieron en mayor medida de prestaciones por desempleo y otras prestaciones, así como de pensiones, especialmente para las mujeres, en comparación con los ingresos de personas que no se encontraban en situación de riesgo de pobreza.

En cuanto, a la distribución de la renta por zonas, la renta más baja corresponde a la Ribera de Tudela y la mayor al Pirineo.