Más de 13 millones de personas necesitan ayuda urgente en la República Democrática del Congo

Foto: Acción contra el Hambre
Foto: Acción contra el Hambre

Este país africano, cuya catástrofe humanitaria pasa desapercibida para el mundo, es el más afectado por desplazamientos en todo el continente. Más de 7,7 millones de niños y niñas necesitan protección urgente, con 2 millones en situación de desnutrición severa

Más de 13 millones de personas necesitan ayuda urgente en la República Democrática del Congo

En estos días en los que celebramos la Navidad con las mesas llenas y en las noticias se habla de catástrofes bélicas que nos mantienen en shock como las de Gaza y Ucrania, millones de personas en la República Democrática del Congo no tienen apenas nada que llevarse a la boca. 

Hablamos de una de las crisis humanitarias olvidadas, con un conflicto enquistado desde 2017, el de la República Democrática del Congo que se agravó en especial en la región de Kasai. 

En este lugar de áfrica central, más de 13,3 millones de personas, incluidos 7,7 millones de niños y niñas necesitan ayuda humanitaria y protección urgentemente. En total 7,7 millones de personas padecen inseguridad alimentaria grave, y 2 millones de personas sufren desnutrición severa. Estamos hablando de una población de algo más de tres veces la suma de los habitantes de Navarra que no tienen alimentos para sobrevivir. 

Una ONGD sobre el terreno: Acción Contra el Hambre 

Con 4,1 millones de personas desplazadas, hay que resaltar los medio millón de refugiados que han buscado cobijo en territorio congoleño. La ONGD Acción contra el Hambre ha desplegado una respuesta en esta región, aunque siguen faltando fondos para llegar a todas las personas que necesitan alimentos por lo que se precisa la ayuda para evitar que la catástrofe sea aún peor. 

Iñaki San Miguel Pascual es el Delegado de Acción contra el Hambre en Navarra, Euskadi y La Rioja y recuerda que su tarea como organización humanitaria es “poner el foco en salvar vidas”.  “Somos especialistas en luchar contra la desnutrición a través de varias vías, por un lado el diagnóstico e identificación de los casos de desnutrición infantil, y evitar que el niño fallezca, y a partir de ahí hacer un seguimiento y apoyo a nivel individual y familiar que permita el adecuado desarrollo de estos niños y niñas mediante el acceso a los tratamientos más adecuados y a una alimentación equilibrada de cantidad y calidad”.

Pero Acción contra el Hambre en Navarra en la República Democrática del Congo también actúa a nivel de salud comunitaria. Iñaki San Miguel subraya que trabajan “mano a mano con las estructuras de salud locales, regionales y nacionales, mediante la participación en el diseño e implementación de las estrategias de lucha contra la desnutrición, sin olvidar el trabajo cercano con las comunidades y las madres y padres de los niños y niñas afectados”.

En este sentido apunta que “la capacitación de los cuadros de salud a todos los niveles, y la formación y sensibilización a nivel comunitario, es de gran importancia para asegurar la detección, derivación y tratamiento de los casos de desnutrición infantil” y destaca que “la instalación de capacidades permite un cierto grado de sostenibilidad de las intervenciones”. 

Foto. ACH
Foto. ACH

La desnutrición infantil en la RDC,un problema sanitario de primera magnitud

El Delegado de Acción Contra el Hambre en Navarra recuerda que “la RDC es un país rico en recursos naturales y estratégicos, que sin embargo, padece hambre”. San Miguel advierte que “según el Programa Mundial de alimentos (PMA) de Naciones Unidas (NNUU), más de 27 millones de personas padecen hambre en la República Democrática del Congo (RDC), y casi 7 millones de personas han tenido que dejar su tierra para salvar la vida, para ponerse a salvo en las provincias orientales de Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri, lo que supone la antesala de una catástrofe humanitaria nutricional que no aparece en los medios de comunicación y, por lo tanto, está invisibilizada”. 

“Es tremendo tener que dejar tu aldea, tus tierras, tus muertos, tus animales, tus cultivos y tus pocas pertenencias, y marchar a otro lugar, desconocido e incierto, y ser acogido por otras comunidades también vulnerables, y acabar compitiendo por los mismos recursos que la población de acogida, viviendo en campamentos hacinados y miserables en los que tener o no tener alimento suficiente, cuidados de salud y agua/saneamiento de calidad supone la diferencia entre la vida y la muerte”, ha destacado Iñaki San Miguel. 

“El desafío por conseguir alimentos para superar la inseguridad alimentaria que conlleva el desplazamiento forzoso de millones de congoleños, es un reto diario, de ahí que la ayuda humanitaria en este tipo de contextos sea una prioridad para salvar vidas, así como construir las condiciones adecuadas para a través del desarrollo, se vayan construyendo las bases de una paz imprescindible para el avance del pueblo congoleño.Varios millones de niños y niñas,  sufren desnutrición aguda severa, lo que supone que si no son diagnosticados y tratados con celeridad, pueden llegar a morir”, resalta el Delegado de Acción Contra el Hambre en Navarra.

Iñaki San Miguel considera que “la desnutrición infantil en la República Democrática del Congo es un problema sanitario de primera magnitud, cuyo origen es multicausal, de ahí que deba afrontarse desde diferentes frentes más allá del meramente nutricional, abarcando lógicamente los problemas de salud, la seguridad alimentaria (acceso a alimentos en cantidad y calidad) a través de proyectos agrícolas y ganaderos, y generación de medios de vida para que las personas puedan asegurar la satisfacción de las necesidades básicas de sus familias, y cómo no, el agua, saneamiento e higiene”.”Nutrir a la población más vulnerable, los niños y niñas menores de cinco años supone permitir un adecuado desarrollo físico y mental. Un niño o niña desnutrido en los primeros tres años de vida, tiene muchas posibilidades de ser pobre en la edad adulta”, advierte el responsable de esta ONGD en Navarra. 

El 80% de las enfermedades humanas están ligadas al consumo de agua en mal estado suponen, de ahí la gran importancia de que las poblaciones tengan acceso a agua en cantidad y calidad; sepan cómo gestionar esa agua sin que se contamine; cuenten con infraestructuras de saneamiento adecuadas (letrinas) que eviten la defecación al aire libre que supone la contaminación de los cauces de aguas superficiales y por ende la proliferación de enfermedades ligadas al agua como puedes ser el cólera; sepan que lavándose las manos se evitan muchas enfermedades, etc.

Foto: ACH
Foto: ACH .François Lenoir

Colabora con Acción contra el Hambre, que está trabajando en el Congo desde 1997

El hecho de que esta crisis humanitaria en la República Democrática del Congo siga pasando desapercibida por la opinión pública mundial agrava el problema, ya que según la ONU, en lo que va de año sólo se ha obtenido apenas el 15% de los 870 millones de dólares necesarios para la respuesta humanitaria en el país. Sin fondos suficientes para afrontar esta crisis es complicado atender las necesidades básicas de las poblaciones desplazadas y de las poblaciones de acogida que también están en riesgo de sufrir hambre y desnutrición.

Acción contra el Hambre lleva trabajando en el Congo desde el año 1997. Esta ONGD ayuda anualmente en torno a 900.000 personas, gracias a la abnegada labor de 367 profesionales, la mayor parte personal local, expertos en diferentes disciplinas. La población navarra también puede colaborar realizando aportaciones para este proyecto en la RDC bien sea de manera periódica o esporádica. Estas aportaciones se pueden deducir además de la declaración de la renta. 

Como apunta Iñaki San Miguel trabajan “en el diagnóstico y tratamiento de los casos de desnutrición infantil y de las madres, ofreciendo además servicios médicos que incluyen cuidados pre y post natales, cuidado de la salud mental y cuidado de la salud sexual y reproductiva”. “Igualmente apoyan a las comunidades en el acceso a agua y saneamiento de calidad, y sensibilizan a las poblaciones sobre cuestiones de higiene, gestión del recurso agua, etc.”. Acción Contra el Hambre apoya “ a las familias en las zonas afectadas por el conflicto para mejorar la seguridad alimentaria (huertos familiares o comunitarios con entrega de semillas y aperos; entrega de animales menores;…) y reconstruir sus vidas proporcionando semillas y herramientas para replantar campos, ofreciendo capacitación y herramientas para iniciar negocios y revitalizando los mercados locales”.

“Incluso, en ocasiones, en ámbitos con población refugiada o desplazada, recurrimos a la transferencia de dinero en efectivo o de cupones. Este tipo de ayuda, la dignifica de tal manera que las personas beneficiarias pueden decidir en qué dedicar el dinero o el equivalente. Los cupones pueden ser en papel, ficha o formato electrónico y se pueden canjear por una cantidad determinada de productos o/y servicios ya sea por un valor monetario determinado o bien por una productos o servicios predeterminados. Estas modalidades de ayuda facilitan la entrega de esta y permiten un mayor alcance de población atendida”, indica San Miguel. 

San Miguel finaliza recordando que el proyecto Inolvidables es un “proyecto imprescindible que pone encima de la mesa de la sociedad aquellos contextos humanitarios olvidados por diferentes motivos, desplazados por otras crisis quizás más mediáticas”. “Consideramos que es importante que otros donantes pongan la mirada en esta iniciativa y contribuyan con fondos para atender estas crisis que no reciben la atención que precisan a nivel social e internacional, pero que sin embargo afectan a millones de personas en todo el planeta”, añade el responsable de Acción Contra el Hambre en Navarra. 

A esta acción solidaria le damos visibilidad dentro del proyecto 'Inolvidables', una iniciativa de la Fundación Caja Navarra para re-informar a la sociedad sobre esas crisis mundiales, aún latentes, de las que ya poco (o nada) se habla.