Familia y amistades convocan una marcha entre San Juan y el paseo de Sarasate el próximo 4 de febrero

Foto: Concentración en solidaridad con Gabriela, desaparecida desde el día 6. Ignacio Solla
Foto: Concentración en solidaridad con Gabriela, desaparecida desde el día 6. Ignacio Solla

Casi dos meses después de su desaparición, Gabriela Reyes continúa en paradero desconocido

Familia y amistades convocan una marcha entre San Juan y el paseo de Sarasate el próximo 4 de febrero

De origen dominicano y 35 años de edad, Rosa Gabriela Reyes Chávez fue vista por última vez el día 7 de diciembre de 2023 en el bar Antequera, en el barrio pamplonés de San Jorge, un establecimiento frecuentado por la comunidad latina. La mujer, de 35 años y madre de dos niños, fue vista por última vez el 7 de diciembre en un establecimiento frecuentado por la comunidad latina.Según la versión de su novio, aquella noche habían quedado en casa de él, por lo que Gabriela habría desparecido en algún punto por determinar en los escasos cien metros que separan el bar en el que se la vio por última vez y la casa de él.

Aunque hay muy pocas certezas en torno a esta desaparición, de lo que no hay duda es que Gabriela estuvo en el bar con amigos, pero entró y salió sola. Así lo certifican las grabaciones de una cámara de seguridad. También se sabe que un hombre -habitual del establecimiento- se acercó a hablar con ella por detrás, le dio un beso y le pidió que mirara el móvil. Después, ella se marchó, llorando, alrededor de la una y media de la madrugada. Nunca llegó a casa. La tarde del mismo día 8, al darse cuenta de que su teléfono no tenía señal y no le llegaban los mensajes de WhatsApp, la familia de Gabriela presentó denuncia de la desaparición, que casi dos meses después sigue sin resolverse.  

¿De verdad puede hoy una mujer desaparecer sin dejar rastro en Pamplona?

Ella, que lleva ocho años en España, mantenía un contacto continuo con sus dos hijos, de 16 y 18 años, que residen en República Dominicana y a los que tenía programado ir a ver en febrero. Tenía pensado "traerlos”, como ya había hecho con su hermana Mariel, de 33 años y vecina también de Pamplona. Por eso la familia descarta que la desaparición haya sido voluntaria o que Gabriela decidiera quitarse la vida. A fecha de hoy siguen sin explicarse qué le ha podido pasar y la ausencia de noticias les tiene en vilo. Viven en la incertidumbre y el temor. "El juez decretó el secreto de sumario y la policía les informa con cuentagotas", relatan familiares y amigos. 

En una de las batidas organizadas para buscarla se encontró el bolso que llevaba Gabriela la noche de su desaparición junto al río Arga. Fue hallado en un lugar cercano a la casa de su novio, en el parque de la Biurdana, un punto que queda fuera del recorrido que la mujer tenía que hacer para ir desde el bar en el que había estado hasta la vivienda de su pareja. Dice la familia que "él ha contado que se quedó dormido y que cuando se despertó tenía dos llamadas perdidas de Gabriela pero que, cuando le devolvió las llamadas, su móvil ya no daba señal. También ha contado Muriel que su hermana había quedado en llevarle algo para cenar, pero sin embargo en el bar Antequera no había pedido nada para llevar. Las cosas no les cuadran".

Cartel de la manifestación
Cartel de la manifestación