Esparza se "borra" de cualquier negociación sobre los presupuestos de Navarra mientras pide la "gratuidad" de los centros 0-3 privados
Javier Esparza, presidente de UPN, ha ofrecido declaraciones tras la reunión de la Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra. En sus intervenciones, Esparza expresó su preocupación por la aparente sintonía entre el Partido Socialista y Euskal Herria Bildu en los últimos años. Se refirió específicamente a la influencia que Bildu estaría ejerciendo sobre la política penitenciaria del gobierno de España, señalando que "ahora son quienes respaldan a los terroristas de ETA los que definen dicha política".
Esparza enfatizó que esta situación implica que aquellos que apoyan a los presos terminan definiendo la política penitenciaria, convirtiéndose no solo en parte de ella, sino también en jueces que buscan su propio beneficio para salir de la cárcel. Afirmó que esta realidad se confirma a través de comunicaciones entre la izquierda abertzale y el gobierno de España, subrayando la preocupación por la negociación de la política penitenciaria a cambio de apoyo político.
En otro aspecto, Esparza abordó la presentación por parte fe UPN de una proposición de ley sobre la gratuidad de la educación para niños de cero a tres años, tanto en centros públicos como privados. Argumentó que la falta de plazas en centros públicos obliga a las familias a recurrir a centros privados, y abogó por la igualdad de derechos, defendiendo que las familias que optan por centros privados también deberían recibir apoyo.
Respecto a los presupuestos, Esparza anunció que presentarán una medida a la totalidad, criticando la supuesta sumisión del Partido Socialista a Bildu en la toma de decisiones en Navarra. Afirmó que el acuerdo presupuestario se hizo entre el PSOE y Bildu, señalando que los demás partidos son meros "palmeros" o comparsas. También criticó la falta de transparencia en la distribución de fondos para entidades vinculadas de alguna manera a Bildu, como los municipios gobernados por los abertzales acusando al PSN de dar un "cheque en blanco" por valor de 4.4 millones de euros.
Esparza acusó al Partido Socialista de mentir al presentar el presupuesto como progresista, argumentando que destina menos porcentaje a políticas sociales en comparación con la gestión de gobiernos de UPN. Cuestionó la efectividad de las políticas de salud y derechos sociales propuestas en el presupuesto, alegando que se centran en "estudios" en lugar de proporcionar soluciones prácticas.
En conclusión, Esparza anunció que UPN no negociará con el Partido Socialista, acusándolos de mentir de forma compulsiva. Criticó al portavoz del PSN, Ramón Alzórriz por mentir constantemente sobre UPN, catalogándolo como un "mitómano".
