Las diferencias entre altercado y agresión evitan la condena del Parlamento a la situación de acoso vivida por la Presidenta del Gobierno en Cabanillas
En una sesión marcada por la controversia y la falta de consenso, la Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra se vio sumergido en un debate acalorado sobre la reciente situación de acoso vivida este viernes por la presidenta del Gobierno, María Chivite en Cabanillas. La cámara legislativa, incapaz de llegar a un acuerdo unánime por la oposición de VOX en ambas, optó por rechazar varias declaraciones institucionales que buscaban abordar diferentes aspectos del incidente, así como otros eventos relevantes.
El primer punto de fricción era una propuesta de declaración institucional presentada por los socialistas que calificaban lo ocurrido de agresión, rechazando el comportamiento antidemocrático de las personas autoras de la agresión y de quienes les apoyan. EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin votaron a favor, mientras que UPN, PPN y Vox se opusieron a la propuesta.
La segunda declaración tampoco prosperó y estaba presentada por el Grupo Parlamentario UPN, evidenciando la división entre las diferentes fuerzas políticas representadas en la cámara. Mientras que PSN, EH Bildu, Geroa Bai y Vox votaron en contra, Contigo-Zurekin se abstuvo, y solo PPN apoyó la condena de los altercados.
El desacuerdo persistió incluso al tratar otros temas, como la oposición a toda forma de violencia, el apoyo a las víctimas de los atentados terroristas en Moscú, y la defensa de la libertad de creación artística en el caso de LKN, que tampoco prosperaron.
