Alrededor de 5,8 millones de euros es lo que necesitará el Ayuntamiento de Pamplona para asumir los compromisos que surjan con la nueva Ordenanza Reguladora de las Ayudas Municipales a la Rehabilitación de Edificios, frente a los 900.000 euros destinados en la actualidad a tal fin. Ése es el cálculo que ha realizado el Consistorio y que la concejala delegada de Urbanismo y Vivienda, Izaskun Zozaya, ha presentado hoy a los grupos municipales en su comparecencia a petición propia en la Comisión de Urbanismo. El aumento de la cuantía responde a la ampliación del ámbito de la ordenanza, ya que se plantea que la nueva regulación, extienda las ayudas a toda la ciudad, manteniendo la condición de área prioritaria del Casco Antiguo, cuando la normativa actual solo afecta a Casco Antiguo y Ensanches.
El objetivo es que la nueva ordenanza de rehabilitación de viviendas englobe por primera vez toda la ciudad para regular las ayudas municipales en materia de rehabilitación, accesibilidad y eficiencia energética, dando prioridad a las comunidades de propietarios frente a propietarios individuales. El documento, aún en fase de aprobación, quiere actualizar la normativa anterior, vigente desde 2007.
Precisamente la vivienda es una de las prioridades de esta legislatura, tanto en materia de rehabilitación y regeneración urbana como en nuevos desarrollos urbanísticos, todo con el objetivo de lograr un parque de vivienda a precio asequible, tal y como ha reconocido la concejala Zozaya. En línea con esa prioridad, existen desarrollos urbanísticos clave, como el proyectado para Donapea, tras el acuerdo con la Cendea de Galar, que permitirá la construcción de hasta 5.000 viviendas nuevas, la mitad de ellas, protegidas.
También sigue adelante el proyecto de renovación de Etxabakoitz, en el ámbito de la nueva estación del tren de alta velocidad, que crearía 12.000 nuevas viviendas y nuevas dotaciones públicas. Asimismo, Zozaya ha resaltado las más de 500 viviendas previstas en la urbanización del ámbito de Txantrea Sur y el PSIS de la UPNA que, aunque en menor medida, también permite nuevas construcciones que conectarían el barrio de Arrosadía con Lezkairu, a través de 300 nuevas viviendas.
Además, se seguirá trabajando en el PEAU del Ensanche, con la vista puesta en transformar el barrio y mejorar la peatonalización de la zona, y en proyectos de regeneración de barrios como el que afecta a las inmediaciones del edificio IWER-Matesa y las viviendas municipales de San Pedro, en el barrio de Rochapea.
También en el ámbito de la regeneración y mejora de la ciudad, y concretamente del Casco Antiguo, se inscriben los proyectos de rehabilitación de varios inmuebles, basados en reagrupar edificios que en la actualidad no cuentan con las condiciones básicas de habitabilidad por su tamaño para construir nuevos inmuebles, de la mano de la empresa pública Pamplona Centro Histórico. Éste es el caso del proyecto de la calle Descalzos 55-61, cuyas obras comenzarán en el segundo semestre de 2024, o el que afecta a las viviendas y locales situados en las calles Jarauta 58 y Eslava 26, para el que el Ayuntamiento continua en negociaciones con los propietarios para llegar a acuerdos. En el caso del proyecto para los edificios de Jarauta 7-21, la propuesta municipal pasa por una ejecución por fases. Con todas estas iniciativas, el Consistorio busca lograr dos objetivos fundamentales: la mejora del entorno urbano y crear y fomentar viviendas.
Otras inversiones
Éstas no son las únicas actuaciones previstas por la empresa pública Pamplona Centro Histórico. En su apuesta por mejorar el centro histórico, prevé invertir un millón de euros en el Aquavox de San Agustín para adecuar las instalaciones tras el paso de los años. De hecho, existe un proyecto de intervención específico para reformar la piscina de 34 grados, y se está trabajando en la redacción de un plan director para programar los trabajos de renovación. Dentro de estos trabajos se incluirán también actuaciones de eficiencia energética. La concejala delegada de Urbanismo y Vivienda, Izaskun Zozaya, ha dado a conocer esta información en la Comisión de Urbanismo, en una comparecencia en la que ha desgranado las principales líneas de actuación de su área y de la Gerencia de Urbanismo durante la presente legislatura.
Inaugurado en octubre de 2009, el aquavox pertenece a la empresa pública Pamplona Centro Histórico. Cuenta con una zona de balneario, con una piscina de hidromasaje a 34º, una zona de contrastes, duchas especiales aromatizadas, pediluvio, fuente de hielo, sauna húmeda, sauna seca y zona de relax. Además, las instalaciones se completan con una sala de fitness, otra de spinning, dos piscinas cubiertas y una sala actividades. En estos momentos, la instalación está gestionada por Masquatro SL.
Colaboración con otras administraciones
El Ayuntamiento de Pamplona colabora con otras administraciones e instituciones públicas para el desarrollo de distintos proyectos como la ampliación del Palacio de Justicia, para lo que el Consistorio ha cedido una parcela municipal al Gobierno de Navarra, o la reubicación de las cocheras de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, que se ubicarán en dos parcelas municipales del polígono de Agustinos.
Un plan director para el cementerio
Dentro del servicio ambiental y sanidad, las acciones del área se concentrarán en el cementerio municipal, para el que se prevé un plan director en el que se haga frente al incremento de cremaciones y se adecue el servicio a las diferentes culturas y creencias. Todo ello, sin descuidar la accesibilidad y urbanización del entorno del cementerio San José. En este sentido, se quiere modificar la ordenanza para incluir las obligaciones de conservación de los espacios del cementerio y regular la estética de este espacio.
Asimismo, se regularán las colonias felinas, para tratar de implantarlas en zonas adecuadas. Por último, el Consistorio quiere potenciar el minizoo de la Taconera, con una mejor señalización e información sobre especies animales y vegetales del entorno.
