Más de 108.000 personas han disfrutado este verano del programa ¡Viva Pamplona, viva!

Juanito Makandé. 29 de agosto. Escenario Ciudadela SXXI, Pamplona.
Juanito Makandé. 29 de agosto. Escenario Ciudadela SXXI, Pamplona.
La Ciudadela, con un escenario al aire libre y todas sus salas de exposiciones abiertas, ha sido el principal punto de encuentro de '¡Viva Pamplona viva!', que ha llegado también al patio del Palacio de Ezpeleta, y a multitud de plazas y parques tanto del centro de la capital, como de cada uno de sus barrios, ha informado el Ayuntamiento.
Más de 108.000 personas han disfrutado este verano del programa ¡Viva Pamplona, viva!

Las más de 400 actividades culturales del programa '¡Viva Pamplona viva!' organizadas a lo largo de todo el verano por el Ayuntamiento de Pamplona han sumado 108.231 asistentes. Este programa se puso en marcha como respuesta a la cancelación de los Sanfermines por segundo año consecutivo.

La Ciudadela, con un escenario al aire libre y todas sus salas de exposiciones abiertas, ha sido el principal punto de encuentro de '¡Viva Pamplona viva!', que ha llegado también al patio del Palacio de Ezpeleta, y a multitud de plazas y parques tanto del centro de la capital, como de cada uno de sus barrios, ha informado el Ayuntamiento.

El Consistorio instaló al inicio del verano un escenario al aire libre en el recinto amurallado de la Ciudadela, en una ubicación que permitía controlar el aforo y distribuir a los asistentes para garantizar la distancia social recomendada. Este lugar se ha convertido en el centro de la programación de '¡Viva Pamplona viva!', acogiendo, por ejemplo, los conciertos de 'Noches de Ciudadela' que ha traído las noches de los viernes y los sábados a artistas de primera línea nacional. En total, acudieron a estas citas casi 11.100 personas, con ocho citas que agotaron sus localidades y otras cuatro con un aforo superior a las 600 personas.

El escenario al aire libre de la Ciudadela también ha acogido el espectáculo de la Comparsa 'Baile de gigantes'. Se ponía en marcha como la única solución práctica para que los más pequeños pudieran ver a los gigantes, cabezudos y kilikis en acción dos años después respetando las medidas sanitarias vigentes. En total se programaron 18 sesiones y todas las invitaciones -distribuidas a través de la web para evitar atraer a un gran número de personas a un lugar físico- se agotaron en pocas horas o incluso minutos, hasta completar los 14.400 asistentes.

FESTIVALES, MÚSICA EN DIRECTO Y ARTES CIRCENSES

El Festival de las Murallas volvió un año más a la Ciudadela con espectáculos adaptados a la normativa sanitaria vigente de los que han podido disfrutar más de 8.000 personas. El espectáculo inaugural, de la mano del grupo local Suakai, que este año se trasladó a la Vuelta del Castillo en busca de más espacio, y el espectáculo 'Volatineros', que tomó las murallas de los fosos como escenario. Además, se realizaron catorce pases de un espectáculo que homenajeaba a la funambulista pamplonesa Remigia Echarren, la 'Reina del Arga' en el centenario de su fallecimiento. En la recta final del verano, la Ciudadela también acogió el festival 'Musica en marcha', en el que los jóvenes talentos de la ciudad pudieron actuar desde el escenario al aire libre durante dos tardes.

El escenario de Ciudadela ha tenido una programación constante a lo largo de todo el verano. Los 'Jueves de jazz' llevaron hasta el recinto amurallado cuatro conciertos, de los que disfrutaron casi 1.800 personas. Las bandas de música de Navarra también se subieron al escenario ofreciendo nueve conciertos de diferentes géneros, de los que pudieron disfrutar más de 2.800 personas. Las asociaciones culturales de inmigrantes de la ciudad, por su parte, pudieron mostrar en este espacio su trabajo y sus tradiciones con dos ciclos en torno al folklore a los que acudieron casi 3.200 personas. 'Melodías del mundo', 'El día de la ópera' o una cita gratuita con la Orquesta sinfónica de Navarra fueron otras de las citas a las que dio cobijo este escenario.

Dentro de los festivales que se han llevado a cabo en este recinto y que han contado con venta de entradas, el festival 'Pim Pam Ville' se celebró por segundo año consecutivo en la Ciudadela, donde congregó a casi un millar de personas. Este recinto nuevamente fue una de las sedes del festival 'Flamenco on Fire', que también hizo parada en el balcón de la Casa Consistorial, y los palacios de Ezpeleta y Condestable, con una afluencia total de 2.330 personas.

PUNTOS REPARTIDOS POR TODA LA CIUDAD Y SUS BARRIOS

El Jito Alai acogió un año más las actuaciones del festival 'Danzad, danzad, malditos', con cuatro citas en las tardes de los sábados que congregaron en total a más de 2.200 personas. Los viernes por la tarde, la Plaza de la O se convertía en el mejor lugar para ver 'Atardecer Pamplona' acompañados por el arte, la tecnología y el medio ambiente. Más de 3.000 personas acudieron a alguna de las citas que se programaron. Otras tantas asistieron a alguno de los doce conciertos programados en varios puntos de la ciudad dentro de la iniciativa 'Salas de música en la calle'. Se trataba de apoyar a los grupos locales y a los negocios de hostelería que habitualmente programan sus conciertos, y que, debido a la pandemia, no lo habían podido hacer en los últimos meses. Un programa de música en vivo al que completó el ciclo 'Enklaves', que llevó los sonidos locales hasta puntos singulares de la ciudad, con una audiencia total de más de 1.600 personas.

La Pamplonesa se ha acercado a los barrios programando a lo largo del verano ocho conciertos en otros tantos puntos, que han disfrutado más de dos mil personas. Casi 4.000 personas disfrutaron a lo largo del mes de agosto de una noche de cine de verano en Pamplona. El programa 'Noches de cine' ha cumplido este año su 25 aniversario demostrando su arraigo en los barrios de la ciudad, que también han sido el escenario de los 32 conciertos organizados por alguno de los grupos no profesionales del catálogo municipal, con una afluencia total de unas 4.800 personas.

Este verano, por primera vez se organizó un alarde de txistularis nocturno, que se programó en la Plaza del Castillo y al que asistieron las 750 personas que permitía el límite del aforo del recinto acotado. El parque de la Runa del barrio de la Rochapea acogió además el festival 'Mujeres al frente', que congregó a casi 1.200 personas.

EL PATIO DEL PALACIO DE EZPELETA

El Patio del Palacio de Ezpeleta, por motivos de organización y seguridad frente al Covid-19, ha sido uno de los lugares que ha concentrado gran parte de las actividades programadas por '¡Viva Pamplona viva!'. Allí se desarrollaron los conciertos en familia de 'Versionando', el ciclo 'Respirando música en familia' o propuestas de artes de calle y diversos talleres. En total, 3.363 personas disfrutaron de alguna de estas actividades. Además, los más pequeños pudieron disfrutar en la Ciudadela de un plan para jugar y disfrutar en euskera, gracias a la iniciativa 'Mihiluze'.

En el segundo año consecutivo sin Sanfermines, la programación de '¡Viva Pamplona viva!' quería hacer un homenaje a las fiestas a través de las exposiciones. De este modo, se plantearon varias muestras entre Ciudadela y el Palacio de Condestable centradas en la temática de San Fermín, pero con diferentes enfoques. En total, a lo largo del verano, visitaron alguna de las exposiciones más de 30.000 personas.

Así, se recordaron Sanfermines pasados a través de la mirada de fotógrafos como Inge Morath o Jim Hollander. También se pudo disfrutar de las visiones artísticas de unos Sanfermines en época del Covid-19, de una treintena de pintores y escultores navarros. Además, se hizo un homenaje a los carteles anunciadores de las fiestas de San Fermín, y se trasmitió a los asistentes la sensación que se vive en Pamplona del 6 al 14 de julio a través de un montaje audiovisual.

También en torno a los Sanfermines, el programa '¡Viva Pamplona viva!' ofreció dos propuestas de rutas literarias. Se trata de recorridos guiados por la ciudad que, del 6 al 14 de julio abordaron el tema de las fiestas y de cómo éstas han sido reflejadas en la literatura universal. Una vez superados estos días, las rutas abordaron también otros referentes de la ciudad. Esta actividad se ofreció tanto en castellano como en euskera.