¿Es seguro viajar a Kenia en plena pandemia?

A pesar de la pandemia, viajar es una necesidad que crece en todos nosotros. Por fortuna, países como Kenia no han erigido grandes restricciones para ingresar en su territorio, aunque el visado sí sea necesario. Además, una opción ideal —en especial, el safari— para disfrutar de su mágica naturaleza reduciendo la exposición al contagio. 

Viajar para guarecer las limitaciones de la pandemia

Arrastrando casi ya dos años de pandemia desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la declaró como tal —en marzo de 2020—, el ansia por viajar no ha dejado de crecer entre la población. La necesidad de un respiro, de relajarnos lejos de casa y, de paso, ver mundo, parece no acabar de conciliar los viajes con el coronavirus. A todas luces, las impresiones tanto por parte de la población como de los gobiernos son, si no de incertidumbre, francamente extrañas. A caballo entre evitar los contagios, pero reactivar el influjo económico del turismo, países como Kenia permiten la entrada a los turistas aportando algo de luz al oscuro y profundo túnel de la pandemia.

Limitando las restricciones a la solicitud de visado de Kenia —obligatoria para ingresar en el territorio— y a ciertos requisitos sanitarios, el país africano no exige una pauta de vacunación contra el coronavirusa sus visitantes. De hecho, y a diferencia de otros países cuyas medidas se han incluso reforzado durante el transcurso de esta era, tampoco es preciso someterse a una cuarentena al llegar al país. Bastando con no tener una temperatura superior a 37’5ºC o mostrar síntomas claros de Covid-19. Razón por la que, a su vez, el Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno español no prohíbe, pero sí advierte sobre el riesgo sanitario, viajar al impresionante país del África oriental.

Antes de nada, ¿es seguro viajar a Kenia en contexto de Covid-19?

Si bien la República de Kenia repite la gráfica ascendente de contagios que han podido experimentar el resto de países, España ha reportado más casos de Covid-19 que Kenia. Tratándose de dos países con un grueso poblacional más o menos similar —con más de 47 millones de ciudadanos españoles frente a 53 millones de keniatas— Kenia apenas ha alcanzado los 300.000 casos el último año, mientras que España ocupa el puesto número 11 del ranquin mundial con más de 5 millones de casos confirmados y que encabezan los EEUU con 51 millones. Sin embargo, el Gobierno de la República tan sólo ha vacunado poco más del 7% de los keniatas.

Esa es la razón por la que, a pesar de la aparente seguridad que emane el país, el virus nos recuerda que siempre debemos extremar las precauciones. Y no sólo en Kenia, si no también en el resto del mundo y, por supuesto, en nuestro propio país. Con todo, una necesidad asumible si evitamos concurrir zonas muy aglomeradas ya que, a pesar de su atractivo turístico, nos situarían cara a cara con la posibilidad de contagio. Para nuestra suerte, una opción fácilmente abarcable, dado que, irónicamente, algunas actividades como el safari aseguran menor riesgo de contagio. En especial, dado que estaremos en la naturaleza y, seguramente, rodeados de muy poca gente.

Safari en Kenia: evitar contagios y disfrutar de la naturaleza

El continente africano es un territorio que siempre ofrece postales de ensueño. Una suerte de realismo mágico donde la naturaleza y la civilización conviven en un solo pulso, que no es otro que el de la vida misma. Obviando visitar las ciudades en caso de que no sea necesario, y siguiendo las recomendaciones antes comentadas, Kenia goza de 23 asombrosos parques naturales. Zonas que nos aseguran una baja población humana, pero una increíble biodiversidad de la que será para siempre testigo y protector nuestro recuerdo. Con un clima puramente tropical y abarcando el Océano Índico en su costa, un territorio de asombro y aventura inagotables.

Asimismo, optar por un viaje rural, en la naturaleza virgen que ofrece Kenia en muchas de sus zonas territoriales, es también una oportunidad para visitar tribus y culturas como los Masái. Aunque su área pueda parecer relativamente aislada de las grandes aglomeraciones, recordando que en dicho caso deberemos mantener aún una distancia prudencial y seguir los protocolos de autoprotección sanitaria. Una actividad que, como lo son los safaris, es respetuosa con el entorno, causando un impacto mínimo al ejercer de turistas observacionales, pero no inmiscuirnos en la magia de su autenticidad. Basta con leer más sobre safari en Kenia para percatarnos de dicha condición.

De hecho, una de las principales motivaciones para hacer safari radica en su enorme diferencia respecto a los zoológicos. Donde los animales permanecen encerrados en una condena a muerte que no sólo los exhibe como trofeos vivos, si no que, además, fulmina su derecho a la libertad frustrando sus instintos. Así, en libertad, admiramos la vida en su máximo esplendor. Sin causar impacto, sin tortura física ni psicológica. Turistas de un mundo que amenaza con desaparecer por la endiosada y destructora huella del ser humano. En definitiva, una experiencia que nos cambiará por dentro a través de todo cuanto percibimos fuera.

A tener en cuenta

Por último, recordar que, pese a la aparente seguridad que pueda sugerir aislarse en la naturaleza de la República de Kenia, es recomendable no bajar la guardia. En primer lugar, en relación a los posibles contagios de Covid-19 —aunque visitemos una tribu, no sabemos si existen casos en su población— y, en segundo y consecuente lugar, para evitar traer de vuelta el virus en nuestro retorno.  

Además, la OMS también recomienda, como medio preventivo vacunarse contra otras enfermedades que existen en Kenia, tales como la tifoidea, las hepatitis A y B, la fiebre amarilla, la rabia, la meningitis o la influenza. Por todo lo demás, y de nuevo, no olvidar solicitar nuestro visado—fácilmente vía online en plataformas como Visaturismo— y, sobre todo, disfrutar al máximo nuestro viaje al corazón de África.