La Unidad de Acondicionamiento Físico del Hospital García Orcoyen de Estella ha tratado en un año a 47 pacientes

Foto: una paciente con una carga
Foto: una paciente con una carga

Es recurso "pionero" en el SNS que se puso en marcha en enero de 2021 con el objetivo de mejorar la capacidad funcional

La Unidad de Acondicionamiento Físico del Hospital García Orcoyen de Estella ha tratado en un año a 47 pacientes

La Unidad de Acondicionamiento Físico del Hospital García Orcoyen de Estella ha tratado en un año a 47 pacientes desde su creación en enero de 2021 con los objetivos de "educar, instruir y entrenar al paciente para mejorar su capacidad funcional, proporcionando las herramientas que posibiliten su autonomía en el futuro".

Según ha informado el Gobierno de Navarra en nota de prensa, de los 47 pacientes, 13 habían presentado una inmovilización prolongada; 28 una limitación funcional, tras un periodo de convalecencia por neumonía debido a COVID-19; dos eran pacientes desacondicionados/obesos con dolor en trocánter (protuberancia ósea de fémur), cadera o rodilla; uno era paciente desacondicionado con Parkinson y otro por esclerosis múltiple estable. El grupo se completó con un paciente que presentaba enfermedad pulmonar a la espera de trasplante y otro paciente que padecía claudicación intermitente (enfermedad arterial que afecta a los miembros inferiores).

En la actualidad, según explican la doctora Irene Aguirre, la doctora Isabel Leiva y la doctora Claudia Villanueva, de la sección de Rehabilitación del Hospital García Orcoyen, "existe evidencia científica de que una actividad física regular tiene efectos beneficiosos sobre la salud al disminuir la mortalidad prematura y el riesgo de desarrollar diversas enfermedades". La inactividad física es "uno de los problemas de salud pública más importante" del siglo XXI.

En la sección de Rehabilitación del Hospital García Orcoyen se atienden diariamente a pacientes "desacondicionados" con diversas patologías que, en muchas ocasiones les producen disminución de la capacidad física, dolor, discapacidad o reducción de la esperanza de vida. El objetivo de la rehabilitación es "mejorar la capacidad física de los pacientes, aumentar su autonomía y mejorar la calidad de vida y, si es posible, la supervivencia".