Problemas en los ascensores de Echavacoiz: el consistorio asegura que no hay daños en la estructura tras desprenderse unas chapas
El desprendimiento en el paso superior del ascensor de Concepción Benítez se produjo por la caída puntual de unos remaches sin que existan problemas en la estructura
El desprendimiento de bandejas de aluminio en el acceso superior al ascensor urbano del entorno de la calle Concepción Benítez se produjo por la caída puntual de una zona de remaches durante la semana pasada. Técnicos municipales comprobaron que aproximadamente ocho chapas de aluminio se habían desprendido y que desde la apertura del falso techo se podía inspeccionar el descuelgue de las bandejas y sus sujeciones. De esta forma se pudo ver el estado de la estructura de la pasarela y las sujeciones metálicas del resto del falso techo de la pasarela. Los informes indican que tanto la estructura como la pintura protectora se encuentran en buen estado, excepto en zonas concretas donde se aprecian leves oxidaciones.
También se observó que los perfiles perimetrales se encuentran en buen estado, así como los soportes de la chapa de aluminio del pavimento de la pasarela. Las oxidaciones que sí se observaron en las bandejas de aluminio es posible que se deban a las filtraciones o el rebosamiento del agua de las dos canaletas que están junto a ella, por lo que se va a trabajar para abrir nuevos tubos de evacuación.
El entorno de la calle Concepción Benítez cuenta desde octubre de 2016 con dos ascensores urbanos que salvan un desnivel de 21 metros y que permitirán al vecindario del barrio moverse con mayor facilidad. Los dos elevadores están conectados entre ellos por pasarelas y además, uno realiza dos paradas intermedias de manera que las cuatro terrazas situadas a distintos niveles en las que se organiza la zona quedan conectadas con el ascensor.
En esas cuatro terrazas se congregan 630 viviendas repartidas en las calles Virgen del Soto, San Raimundo, Nicanor Beistegui, Teodoro Ochoa de Alda y Concepción Benítez. Hasta la apertura de los ascensores las plataformas estaban comunicadas por escaleras, lo que suponía grandes dificultades para realizar movimientos diarios.
