Más de 200 fotografías publicadas e inéditas sobre los Encuentros de 1972 en la muestra ‘Pío Gerendiáin -Koldo Chamorro’, en Condestable

Foto: Expo en Condestable
Foto: Expo en Condestable

Las miradas de estos dos fotógrafos documentan el marco en el que se desarrolló en la ciudad este evento de las vanguardias

Más de 200 fotografías publicadas e inéditas sobre los Encuentros de 1972 en la muestra ‘Pío Gerendiáin -Koldo Chamorro’, en Condestable

Cuando se diseñaron los Encuentros de Pamplona 1972, se consideró prioritaria la difusión de este marco creativo de vanguardia que se desarrollaba en una pequeña ciudad en las afueras de la periferia del arte, bajo una dictadura política y en un mundo que a las nuevas generaciones les costará imaginar: analógico, sin internet, sin móvil con cámara y sin redes sociales. Dos jovencísimos artistas, Pío Guerendiáin y de Koldo Chamorro, cuyas trayectorias les consolidarían como grandes fotógrafos, se encargaron entonces de documentar desde sus respetivas perspectivas lo que estaba sucediendo en Pamplona.

Cinco décadas después, en el marco de la conmemoración, el Ayuntamiento de Pamplona acoge sus miradas en la muestra que lleva sus nombres y que en unos casos sirven para rememorar, y en otros para conocer, lo que aquel acontecimiento memorable supuso para la ciudad, sus habitantes y los creadores que participaron. Esta mañana en el Palacio del Condestable Jorge Urdánoz, director del Área de Cultura e Igualdad del Ayuntamiento de Pamplona; Pío Guerendiáin, fotógrafo; Oihane Chamorro, hija del fotógrafo y en representación de la Asociación Cultural Koldo Chamorro y Javier Manzanos, comisario de la muestra han presentado los contenidos de una exposición de más de 200 imágenes que se podrá visitar hasta el 20 de noviembre.

Guerendiáin recibió el encargo de seguir y documentar fotográficamente los eventos que se sucedían y Chamorro lo hizo como un buscador de imágenes, pero las miradas de ambos contribuyen a dar testimonio de un acontecimiento histórico poliédrico, a medio camino entre la aceptación y el rechazo el público, difícil de apreciar en su totalidad ya que sucedieron muchas cosas en muchos sitios y, en ocasiones, a la vez. Las fotografías de Pío Guerendiáin y de Koldo Chamorro, algunas de las primeras ya conocidas, las segundas inéditas, ofrecen dos relatos que constituyen verdaderos documentos de los encuentros, una cita que en palabras de Fernando Huici “contribuyó de modo decisivo a poner, al fin, los relojes del arte contemporáneo español a la hora del mundo”. La muestra se puede visitar en las salas 1 y 2 del palacio del Condestable, de lunes a domingo de 9 a 14 horas, y de 17 a 21 horas.

Foto: exposición sobre los Encuentros en Condestable
Foto: exposición sobre los Encuentros en Condestable

Imágenes con valor etnográfico

Pío Guerendiáin (Pamplona, 1946) recibió el encargo de José Luis Alexanco y Luis De Pablo para documentar las acciones artísticas que se iban a desarrollar en los Encuentros de Pamplona 1972. Como aficionado a la fotografía, desde 1963 era socio de la Agrupación Fotográfica y Cinematográfica de Navarra (AFCN). La exposición recoge una amplia selección realizada por el propio autor y cedidas en su mayor parte por el Museo de Navarra. Y es que, pese a su juventud, en los años 1972 y 1978 ganó el Premio Negtor, considerado entonces entre los más prestigiosos premios nacionales de fotografía.

Su trabajo es un referente entre la generación de fotógrafos que surgieron en los años ochenta y aportaron una visión nueva a la fotografía española, destacando especialmente por el valor etnográfico de sus imágenes. Sus fotografías se han publicado en revistas como Arte Fotográfico, Nueva Lente y Flash-Foto y en anuarios y enciclopedias, sobre todo de Navarra. Guerendiáin ha participado en numerosas exposiciones individuales y colectivas y sus fotografías forman parte de importantes colecciones como la Biblioteca Nacional de París, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el IVAM o el Museo de Navarra.

En la AFCN, de la que es Presidente de Honor y fue presidente titular entre 1976 y 1982, desarrolló el Salón San Fermín de Fotografía y los talleres de fotografía avanzada entre 1986 y 1990. Además, dirigió la Galería Contraluz entre 2001 y 2011, donde organizó más de 100 exposiciones. Entre sus trabajos podemos reseñar, además del magnífico reportaje que realizó sobre los Encuentros de Pamplona de 1972, su serie New York, realizada en 1975. Posteriormente realizó las tres series sobre los estratos de flysch de la costa de Zumaia.

Un especialista del blanco y negro

Koldo Chamorro (Vitoria, 1949 – Pamplona, 2009) fue fotógrafo autodidacta desde 1965 y, precisamente en 1972 recibió una beca de la Dotación de Arte Castellblanch para ampliar estudios en el extranjero y trabajó con fotógrafos como Ansel Adams y Brassaï. Ese año un joven Koldo, como un participante más, decide lanzarse a fotografiar las diferentes manifestaciones artísticas que se multiplicaban en Pamplona. Koldo utilizó para esos reportajes la película Tri-X 400 ASA de Kodak y según las condiciones de luz forzaba la película a 800, 1.600 ó 3.200 ASA, con lo que acentúa la aparición de grano en las copias, algo que acabaría siendo característico en el conjunto de su obra. Chamorro guardó los negativos de los 28 rollos que utilizó y que nunca expuso. Hoy, el hallazgo de su hija Oihane ha sacado a la luz su trabajo durante los Encuentros.

La obra de Chamorro forma parte, entre otros, de los fondos del Center of Creative Photography (Arizona), la Bibliothèque nationale de France (París), la Polaroid Collection (Boston), el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid), el Museo de Navarra, la UPNA y la Colección de Arte Contemporáneo del Ayuntamiento de Pamplona. Durante su carrera recibió el Premio Soho News (1981) y el Premio del Instituto Nacional del Libro (1982 y 1991), fue fotógrafo del año de la revista Foto Profesional (1989 y 1992) y finalista del Premio William Eugene Smith (1981 y 1987).

Viajó por Europa, África y el continente americano, y fue miembro de Minority Photographers (Nueva York) y del grupo Alabern. Realizó fotografía editorial (El País, Geo, Condé Nast, Goldberg), publicitaria, de moda e industrial. Fue escritor y profesor invitado de numerosos seminarios y talleres. Sus ensayos y reportajes y sus poemas visuales han sido decisivos en la construcción de un nuevo lenguaje en la fotografía documental española y ponen en valor un país en el que perviven las tradiciones religiosas y paganas. En 1989 el Círculo de Bellas Artes de Madrid organizó una muestra antológica de su obra, junto a la de Josef Koudelka