Desciende la confianza de los consumidores navarros en el primer trimestre de 2022

Foto: entrada al aparcamiento de la plaza del Castillo
Foto: entrada al aparcamiento de la plaza del Castillo

Los índices de confianza de España y la UE reflejan opiniones más pesimistas en el primer trimestre del año

Desciende la confianza de los consumidores navarros en el primer trimestre de 2022

El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del primer trimestre de 2022 en Navarra presenta opiniones pesimistas y continúa la tendencia descendente iniciada en el tercer trimestre del año pasado, y sitúa el índice en -20,5, si bien mejora en 4,7 puntos en términos interanuales, según la encuesta de coyuntura económica de los hogares del Instituto de Estadística de Navarra (Nastat).

Las opiniones más desfavorables se observan en la situación económica general tanto actual como esperada y en las expectativas sobre el ahorro, evolución compensada en parte por el dinamismo estimado en la situación económica familiar y la recuperación de las expectativas de demanda.En la Comunidad foral, el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) se deteriora respecto al trimestre anterior, tras pasar de -12,3 a -20,5. En comparación con el mismo trimestre del año anterior la confianza del consumidor muestra una recuperación de 4,7 puntos.

Todos los componentes reflejan opiniones más desfavorables respecto al periodo precedente, destacando el pesimismo sobre la situación económica esperada tanto del hogar como a nivel general y, en menor medida, las expectativas de ahorro y las previsiones de paro.

En términos interanuales, mejoran las expectativas del mercado laboral y la situación económica general esperada, compensando así la pérdida de confianza reflejada en la situación esperada del hogar y en las expectativas de ahorro.

Analizando el Índice de Confianza del Consumidor por sexo, se observan opiniones más pesimistas tanto para hombres como para mujeres. Para este trimestre se cifra el índice en -20,9 para mujeres y -20,4 para hombres, si bien los hombres experimentan una mayor pérdida de confianza que las mujeres, respecto al trimestre anterior.

El Índice de Sentimiento del Consumidor refleja la evolución más desfavorable del periodo y cifra el índice en 58,3, tras el 73,9 estimado en el trimestre anterior.

Todos los componentes reflejan un menor dinamismo respecto el trimestre anterior, mostrando la situación económica esperada tanto general como del hogar, las opiniones más pesimistas del trimestre.

En términos interanuales, los componentes que muestran mayor descenso son momento de compra, situación económica esperada y actual del hogar, evolución compensada en parte por las opiniones optimistas observadas en la situación económica general actual y esperada.

EXPECTATIVAS MÁS PESIMISTAS EN EL MERCADO LABORAL

El Índice de Expectativas Económicas modera la intensidad del descenso iniciado el trimestre anterior y sitúa el índice en -27,4.

Las expectativas sobre el mercado laboral son las más pesimistas respecto al periodo anterior al pasar de -1,4 a -5,9 en este trimestre, seguido de las previsiones sobre precios y ahorro, evolución que contrasta con las señales de recuperación mostrada en las expectativas de demanda.

En términos interanuales, las expectativas de precios y de ahorro reflejan el deterioro más destacado, compensado en parte por la recuperación estimada tanto en las previsiones del mercado laboral como de las expectativas de demanda.

El Índice de Probabilidad de Compra se modera y se sitúa en 5,71, empeorando 0,79 puntos respecto trimestre anterior.

Todos los componentes reflejan un menor dinamismo respecto al trimestre anterior. En términos interanuales, mejoran las perspectivas de compra de coche y de segunda vivienda.

OPINIONES MÁS OPTIMISTAS SOBRE LA SITUACIÓN ECONÓMICA FAMILIAR

El Índice de Situación Económica Familiar refleja opiniones más optimistas y se sitúa en 20,1 respecto al 19,5 observado el cuarto trimestre de 2021, moderando la tendencia alcista iniciada en el tercer trimestre de 2021.

Esta recuperación deriva del mayor dinamismo de la valoración del ahorro que compensa la pérdida de confianza estimada en las expectativas de ahorro, mostrando las expectativas sobre la situación financiera un perfil de estabilidad.

En términos interanuales, el ahorro es el componente que refleja la evolución más favorable.