La MCP ha reducido su huella de carbono un 29% desde 2014

Del total de emisiones, el 4% proceden del Ciclo Integral del Agua, el 28% del TUC y el 68% de la gestión de residuos


 
La MCP ha reducido su huella de carbono un 29% desde 2014

La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona y su sociedad de gestión SCPSA lograron reducir en 2021 su huella de carbono un 1% respecto a 2020, lo que implica una reducción del 29% desde 2014, año en el que se realizó el primer registro. 

Desde el año 2014 MCP/SCPSA calcula y verifica anualmente su huella de carbono a través de una empresa certificada y, a su vez, la inscribe en el Registro Nacional del Ministerio de Transición Ecológica. Esta huella de carbono permite cuantificar las emisiones de gases de efecto invernadero que son liberados a la atmósfera como consecuencia de los servicios prestados por la organización. La cuantificación permite por lo tanto conocer el impacto que genera dicha actividad en el calentamiento global, convirtiendo de esta manera la huella de carbono en un primer paso fundamental para impulsar proyectos orientados a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. 


El cálculo realizado para las Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) durante 2021 ha contabilizado 42.978 toneladas de CO2eq de las cuales el 4% proceden del Ciclo Integral del Agua, el 28% del TUC y el 68% de Residuos.

 

Iniciativas para reducir la huella de carbono

 

Para la reducción de su huella de carbono, la Mancomunidad y su sociedad de gestión SCPSA han puesto en marcha diferentes iniciativas. Entre ellas, las más importantes son la separación de la materia orgánica de los residuos mediante el 5º contenedor y el compostaje doméstico y comunitario, y la incorporación de autobuses híbridos y eléctricos en el Transporte Urbano Comarcal. Otras acciones reseñables son la instalación de los sistemas de climatización en la ETAP de Egillor (hidrotermia) y en la ETAP de Urtasun (caldera accionada con biomasa de pellets de madera), la incorporación al CMRI (Centro de Mantenimiento de Redes e Instalaciones) de camiones de propulsados por gas y la reducción de fugas de gas en la EDAR de Arazuri.

 

Hay que recordar que las principales emisiones de gases de efecto invernadero de la MCP se producen por la materia orgánica que se introduce junto con la fracción resto y acaba en el vertedero de Góngora. De ahí la necesidad y obligación de separar la materia orgánica en los hogares e introducirla en el 5º contenedor. En este sentido, los grandes retos de MCP/SCPSA son el incremento de la recogida de materia orgánica en el 5º contenedor, y la construcción del Centro Ambiental de la Comarca en la Ciudad del Transporte (Imárcoain) para dejar de enterrar materia orgánica, y poder así reducir muy significativamente las emisiones de GEI derivadas del tratamiento de residuos. 

 

La segunda fuente de emisiones y de contaminación atmosférica es el consumo de gasoil por los camiones de residuos, autobuses del transporte urbano y los vehículos de la entidad. Con objeto de ir reduciendo estas emisiones, la Mancomunidad lleva seis años incorporando autobuses híbridos en la flota del TUC y desde este año 2022 va a abandonar el uso del gasoil para incorporar solo autobuses de gas de origen renovable y eléctrico.


Compensación de emisiones

 

Finalmente, cabe destacar la compensación de emisiones que MCP/SCPSA lleva realizando desde 2018. Eso le ha permitido ser la primera entidad local española en obtener el sello ‘Calculo-Reduzco-Compenso’ del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) para los tres alcances de su actividad. Un total de 17 empresas que trabajan con la entidad ya compensan las emisiones GEI que generan en su actividad. Hay que recordar que también la MCP ha podido compensar emisiones gracias a la restauración del meandro de Areatzea (Huarte), en el Parque Fluvial de la Comarca, que quedó registrado como el primer sumidero de carbono de Navarra.